En esta oportunidad, no hablamos de eventuales malestares por comer mucho chocolate, sino de algo mucho peor: el riesgo de asfixia.

Semana Santa es una fecha que genera mucha expectación en la mayoría de los chilenos. No solo porque es el primer fin de semana largo del año, sino además porque, para los más pequeños, es la fecha en que pasa el Conejo de Pascua dejando dulces y chocolates.

Muchas veces, los padres hacen más concesiones y permiten a los niños comer más dulces de lo que normalmente harían en estas fechas. Si bien es algo sobre lo que expertos en salud alertan, en pos de evitar intoxicaciones por exceso de azúcar, otro riesgo del que no se habla tanto tiene que ver con el potencial de asfixia que tienen algunos huevos de chocolate.

Riesgo de asfixia con huevos de chocolate

Una jornada de diversión y búsqueda de huevitos, puede, lamentablemente, convertirse en una tragedia en un abrir y cerrar de ojos. Y es que los niños, especialmente los más pequeños, al estar tan emocionados por los chocolates pueden caer en descuidos a la hora de masticar bien antes de tragar.

Al momento de escoger los huevos de Pascua en el supermercado, la nutricionista y Health Coach para niños, Camila Alarcón, explicó que se debería optar por aquellos que son huecos, en lugar de los de chocolate macizo.

Un huevo macizo, especialmente aquellos que son del porte de una uva, o más pequeños, pueden quedarse fácilmente atorados en las vías respiratorias de los niños. Esto, ya que es mucho más difícil desintegrarlos.

Por el contrario, un huevo hueco se rompe con la primera masticada, haciéndose pedazos que, por su forma, hacen menos probable que se queden atorados en la vía aérea del menor.

Además, la experta apuntó a que existen otros dulces típicos de esta temporada que también suponen un riesgo para los más pequeños. Por ejemplo, caramelos duros o huevos de chocolate recubiertos con una capa dura de azúcar.

¿Sabes qué hacer en caso de asfixia?

Si bien lo más importante en estos casos es la prevención, es decir, evitar la exposición a alimentos con los que existe riesgo de asfixiarse, sí es fundamental saber cómo reaccionar ante una situación así.

En conversación con Expreso Bío Bío, la enfermera de la Facultad de Medicina de la Universidad Central, Pamela Valdebenito, quien explicó la importancia de la técnica de Heimlich.

“La persona cuando se ahoga con un cuerpo extraño, habitualmente da un aviso, se levanta de la silla, trata de toser (…) Cuando se lleva las manos al cuello, eso es una señal universal de que hay una dificultad respiratoria, ahí tenemos que actuar”.

La técnica de Heimlich “consiste en abrazar, rodear a la víctima por detrás, y colocar una mano, habitualmente es la mano dominante, en la boca del estómago en forma de puño, y con la otra mano hacer la fuerza hacia dentro y hacia arriba”.