Por delitos de “amenaza y atentado contra la autoridad” el Ministerio del Interior se querelló para que se investiguen los mensajes y el intento de atropello que le ocurrió al seremi de Transportes Metropolitano, Matías Salazar.

Dos semanas antes de la paralización de los taxistas por el tema Uber y Cabify, la cual terminó con un bloqueo al aeropuerto, en una página de Facebook se comenzaron a publicar amenazas de muerte en contra del seremi.

Sumado a esto, el 5 de septiembre, un día después de esta manifestación, se vio a una persona mirando sospechosamente la casa del seremi y además, un taxista, del cual se desconoce la identidad, intentó atropellar en la calle Amunátegui a Salazar cuando iba junto a un asesor de la ministra de Transportes.

Estas situaciones provocaron que desde el Ministerio del Interior se querellaran para investigar los hechos ya que, según el jefe de esta cartera, Mario Fernández, la situación demostró que se podría haber provocado un atentado a la seguridad de Salazar.

Parte de la querella menciona los hechos del cinco de septiembre, donde se indica que “un taxi básico disminuyó la velocidad, insultó a gritos al seremi y aceleró intentando atropellarlo; luego al no lograr su cometido, se dio a la fuga del lugar sin que fuese posible identificarlo”.

Por su parte, el seremi de Transportes, Matías Salazar, comentó que no quiere relacionar estos hechos con las quejas que existen por los servicios de Uber y Cabify y que no hay que estigmatizar a todo el gremio.

Desde el gremio, el dirigente Nicolás Sayes, en conversación con Radio Bío Bío, reprochó la actitud del conductor y sostuvo que le parece “raro” que quien debe velar por el buen funcionamiento del servicio realice la querella.