En la novena jornada de búsqueda de los tres jóvenes arrastrados por una marejada en Cobquecura, la Armada dispuso el trabajo de buzos y se sumó un robot submarino embarcado en Constitución.

La delegación presidencial pedirá este lunes a la Fiscalía ampliar el plazo de búsqueda de los hombres desaparecidos.

Con un fuerte llamado al autocuidado y a evitar conductas irresponsables en el borde costero, se realiza la novena jornada de búsqueda de Ismael Botti, Diego Águila y Jorge Leiva, los tres amigos desaparecidos tras ser arrastrados por el mar en el sector Iglesia de Piedra en Cobquecura el pasado 11 de septiembre.

Hay más de 220 personas en las labores de búsqueda, en 43 kilómetros de costa de Ñuble y Maule. La Armada opera con dos embarcaciones. La LSG Talcahuano, en que se embarcaron buzos que se espera que realicen trabajos con equipos de inmersión y la LPM Arcángel, que zarpó desde Constitución, comentó el capitán de Fragata Oliver Spichiger, subjefe de la Gobernación Marítima de Talcahuano.

Bomberos también sigue colaborando, este domingo se sumó el Gersa de Quillón, informó Herman Piceros, superintendente de Bomberos de Cobquecura.

El delegado presidencial regional de Ñuble, Cristóbal Jardua, hizo un llamado a los visitantes a la zona costera a no tomar riesgos, luego de verificar durante el día sábado numerosas conductas temerarias en el borde costero.

Respecto del plazo de búsqueda, que inicialmente se amplió hasta este lunes por parte del Ministerio Público, la autoridad indicó que está toda la voluntad de poder continuar y que así lo van a plantear en la reunión que sostendrán con el fiscal Eduardo Plank en Cobquecura.