Pescadores de la provincia de Llanquihue, región de Los Lagos, piden que se apure el trámite de la ley Supersol, la cual viene a aumentar la protección en las faenas acuícolas artesanales.

Tras la fatal colisión ocurrida en la zona entre una pequeña embarcación y una nave mayor que circulaba con piloto automático, la gente de mar generó una normativa que llegaría a fortalecer la regulación para la navegación en aguas interiores.

La Supersol era una lancha que hace un tiempo estaba con tres hombres a bordo cuando fueron impactados por la barcaza Argelina al sur de Isla Tabón, en el Golfo de Ancud.

El origen del accidente sería el mal uso del sistema automatizado mientras la tripulación almorzaba y las víctimas lanzaban espineles para iniciar las labores. La colisión dejó dos muertos, además de una importante afectación psicológica en el único sobreviviente de la tragedia.

Juan García, dirigente de Caleta Anahuac, dice que aumentó el tráfico en aguas interiores, por el crecimiento de la salmonicultura.

Karen Leviante perdió a su padre y primo en la tragedia de la Supersol y hoy, reflexiona en el mal uso del piloto automático que se da en las naves mayores.

Quien presentó la iniciativa legal hace un tiempo en el congreso es el diputado socialista Fidel Espinoza, quien manifestó que no es aceptable que en el mar no existan medidas que garanticen la seguridad de las personas.

Resta esperar entonces que el poder legislativo tome la iniciativa y comience a avanzar en las etapas necesarias, ojalá sin mas víctimas por colisiones en las aguas de la región de Los Lagos o en cualquier parte de Chile.