La Corte Suprema determinó que Isapre Cruz Blanca deberá cubrir los gastos asociados a los remedios que debe consumir un menor con la enfermedad de distrofia muscular de Duchenne, y que sobrepasan los 30 millones de pesos mensuales, en la ciudad de La Serena, región de Coquimbo. A pesar de que no es el primer fallo que determina lo mismo, las isapres pagan el monto contra reembolso, pese al alto costo del medicamento.

Una familia de La Serena, en la región de Coquimbo, logró que los tribunales de justicia fallaran a su favor y obliguen a una isapre a cubrir los costos de un medicamento que debe consumir su hijo de 14 años de edad, diagnosticado con distrofia muscular de Duchenne.

De hecho, el caso se cerró en la Corte Suprema, que ordenó a la Isapre Cruz Blanca proporcionar un medicamento, cuyo valor es aproximado a los 35 millones de pesos mensuales.

A Matías Chirino le diagnosticaron la mencionada enfermedad cuando tenía 3 años de vida. Ésta, sin terapia, causa un progresivo, irreversible y terminal deterioro del organismo.

La resolución de la Corte

La resolución revoca un fallo anterior de la Corte de Apelaciones de La Serena que había negado este beneficio, validando el argumento de que la dolencia no representaba un riesgo inminente para la vida del paciente, condición necesaria para que se lo concedieran.

La actual resolución se suma a la que la Corte Suprema adoptó en el mismo sentido en favor de Ignacio Alfaro, de 12 años, de Andacollo, y la que dictó la Corte de Apelaciones en el caso de Francisco Alegría, de 6 años, de Los Ángeles. Ambos también afectados por Duchenne.

Sin embargo, el cumplimiento de otras sentencias del mismo estilo ha comenzado a ser evitado por las isapres bajo el argumento de que correspondería hacerlo por la vía de reembolso. Lo que dado sus precios resulta imposible para ellos.

La distrofia muscular de Duchenne

Según la madre del menor, Daniela Oliva, “nosotros intentamos activar el medicamento a través del CAE y la Isapre se negó. Después con el recurso de protección también nos fue mal y posteriormente nos favoreció la resolución de la Corte Suprema”.

La mujer señaló que su hijo fue diagnosticado con la enfermedad a los tres años y “se trata de una enfermedad degenerativa que afecta la parte muscular por la falta de una proteína llamada distrofina. Los músculos se van atrofiando, se van dañando, incluido el corazón, los pulmones”.

“Mi hijo en estos momentos está con una miocardiopatía dilatada, pero está todo controlado. Caminar le ha costado un poco porque está perdiendo mucha fuerza en sus piernas y brazos, pero aún mantiene marcha”, narró Oliva, sobre la enfermedad de su hijo.