Ignacio Briones dejó este martes su cargo como ministro de Hacienda, para abordar una posible precandidatura presidencial representando a su partido, Evópoli.
Su puesto fue tomado por Rodrigo Cerda, ingeniero comercial que se desempeñó entre marzo de 2018 y diciembre de 2019 como director de Presupuestos en el gobierno de Sebastián Piñera.
Tras la ceremonia de ajuste ministerial, Briones realizó un discurso en el palacio de La Moneda, donde agradeció al presidente Piñera por elegirlo como ministro de Hacienda.
Señaló que fue un honor ser parte de su gobierno y agregó que “sus consejos y liderazgos en estos más de 450 días han sido fundamentales”.
Junto con ello, agradeció al equipo del Ministerio de Hacienda, “un equipo que fue capaz, pese a toda las dificultades, de salir adelante y sobre todo nunca bajar los brazos”.
Subrayó, por ejemplo, que con ellos lograron la aprobación de cerca de 30 leyes, además de implementar diversas medidas como la Ley de Protección del Empleo, “que protegió 900 mil puestos de trabajo”; el Subsidio al Empleo que ya ha ayudado a 400 mil personas; el Ingreso Familiar de Emergencia y los bonos y préstamos a la clase media.
Igualmente, indicó que ha tenido el privilegio de trabajar con Cerda y que él junto al equipo del ministerio “seguirán jugando un rol clave en esta crisis”.
Palabras con tinte presidencial
Briones destacó que durante su labor en el ministerio se lograron varios acuerdos con los distintos sectores políticos del país, por lo que les agradeció y subrayó que el trabajo en equipo permitirá a Chile superar los tiempos difíciles.
Asimismo, indicó que “hoy comienzo una nueva etapa, lo hago con el apoyo de mi familia, mi esposa, mis hijos, una etapa cuyo norte es querer aportar, con humildad, pero con firme convicción”.
A su juicio, “Chile requiere de reformas sustantivas y ello conlleva responsabilidad”, por lo que deja su cargo con la convicción de trabajar por “los grandes desafíos estructurales que nuestro país tiene por delante”
Ante ello, cerró su discurso llamando a “volver a creer en Chile y en su futuro. Creer que podemos ser un país donde el respeto y la colaboración sea la regla y no la excepción. Creer en los acuerdos para avanzar en una hoja de ruta de reformas ambiciosas y serias y sostenibles en el tiempo. Frente a las soluciones facilistas a problemas complejos, respondamos siempre con rigor”.
“Creamos siempre en las personas, porque ellas, con su esfuerzo, son el motor del cambio. Por eso siempre hablemos con la verdad, hablemos con honestidad. Es la única forma de que Chile pueda volver a confiar en su futuro, es la única forma de volver a levantarnos, es la única forma de volver a creer“, aseveró.
