Sebastián Piñera decidió otorgar el indulto presidencial por razones humanitarias al exagente de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA), Desmóstenes Cárdenas Saavedra, de 65 años, lo que generó el inmediato rechazo de organizaciones de Derechos Humanos.

El exfuncionario de la FACh fue condenado en 2016 a 10 años y un día de cárcel por el secuestro calificado del militante comunista Stalin Aguilera Peñaloza, y mantiene pendientes otras tres condenas, todas enmarcadas en la denominada “Operación Colombo”.

Dicho operativo fue montado por la DINA entre 1974 y 1975 para encubrir la desaparición de más de 100 detractores de la dictadura de Augusto Pinochet.

A la fecha, Cárdenas se mantiene internado en la FACh, con cáncer terminal. Sin embargo, no podrá volver a su casa por las causas pendientes, según detalló El Mercurio.

La presidenta de la Agrupación de Familiares Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, sostuvo que la condición médica del condenado no debe ser utilizado como recurso un para garantizar la impunidad.

En tanto, la presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, Alicia Lira, dijo que esta es una señal a favor de los violadores de derechos humanos.

El abogado defensor de Cárdenas y líder del partido en formación Fuerza Nacional, Raúl Meza, valoró la resolución del Mandatario y dijo esperar que el beneficio pueda extenderse a las demás causas pendientes.

Asimismo, en otras causas judiciales, el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago aprobó la decisión del Ministerio Público de no investigar el incidente en el que el presidente Piñera visitó y se fotografió en Plaza Baquedano, puesto que no sería constitutivo de delito.

El hecho, ocurrido a principios de abril, fue en medio de la cuarentena que mantenían la comunas de Santiago y Providencia debido a la pandemia de coronavirus.