Este sábado se espera que viajen a Roma algunos obispos que integran el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal, para reunirse la próxima semana con el Papa Francisco.

Hasta ahora la Conferencia Episcopal ha mantenido reserva sobre el viaje y los detalles de los temas que abordarán con el Pontífice, aunque según fuentes de Radio Bío Bío actualizarían a Francisco los avances y cambios que han realizado por las denuncias de abusos sexuales.

Juan Carlos Cruz, víctima del excura Fernando Karadima, señaló que “los obispos chilenos son de una soberbia espantosa, una tozudez que no tiene nombre” y sostuvo que irán a defenderse de las críticas, ante el manejo de los casos de pederastia cometidos por miembros del clero.

Sebastián Beltrán | Agencia UNO
Sebastián Beltrán | Agencia UNO

“Yo creo que ellos van a llorarle al Papa que los ha tratado mal, que ya está bueno. Y también quieren decirle que sus renuncias ya caducaron”, acusó, luego que en mayo de 2018 le presentaran su renuncia en conjunto, pero poco a poco el pontífice decidió aceptar sólo algunas de ellas a medida que surgían antecedentes sobre casos de abuso y/o encubrimiento.

“Si son tan valientes, que le digan al Papa lo que dicen a sus espaldas. (Como) cuando Fernando Ramos dice que el Papa no entiende nada porque es argentino”, añadió.

En cuanto a los procesos futuros, Cruz dijo esperar que el 30 de enero le sea negado el sobreseimiento definitivo al cardenal Ricardo Ezzati en la arista del encubrimiento de delitos sexuales, acusando audacia del arzobispo de Santiago al intentar escapar de una indagatoria que recién está comenzando.

Deuda episcopal

Por su parte, para Marcial Sánchez, experto en temas de la Iglesia, los obispos chilenos están al debe con las tareas encomendadas por el Papa. Dijo que hay un trabajo deficiente en cuanto a los temas de abuso.

Aunque “no quiero meterlos a todos en el mismo saco, porque efectivamente hay obispos, como el obispo de Arica o Calama, algunos administradores apostólicos que han sido nombrados, que están haciendo un trabajo bastante serio, Y bastante en silencio. Pero hay otros que a ciencia cierta que no han hecho un trabajo, y están preocupados por ellos mismos”, explicó.

Según Sánchez, la Conferencia Episcopal aún no se pone en el lugar de las víctimas, ya que todavía no se reúne con ellos. Además, no han colaborado efectivamente con la justicia, como pidió el Pontífice.