El aspirante demócrata a la Casa Blanca Pete Buttigieg sorprendió el martes al aventajar a Bernie Sanders en las caóticas asambleas ciudadanas de Iowa, en las que el favorito en los sondeos nacionales Joe Biden se hundió, según resultados parciales publicados con embarazoso retraso.

La primera tanda de resultados de los “caucus” en Iowa, que lanzaron el lunes la carrera para elegir el rival del presidente Donald Trump, fueron decepcionantes para Biden, el exvicepresidente que se presenta como el mejor preparado para derrotar al mandatario el 3 de noviembre, quien quedó cuarto, por detrás de la senadora Elizabeth Warren.

Buttigieg, el moderado exalcalde de South Bend, Indiana, de 38 años, celebró su “asombrosa victoria” en un acto en New Hampshire, el próximo estado en realizar comicios partidarios, con una votación primaria prevista para el 11 de febrero.

“Nunca he tenido más confianza en nuestra campaña, en nuestro equipo y en la visión que nos trajo a este punto”, dijo el candidato, que hace un año era desconocido para el gran público.

Buttigieg, abiertamente gay, hizo una referencia implícita a su orientación sexual al señalar que este resultado demuestra la importancia de creer en uno mismo y en sus convicciones.

El martes se volvió viral en redes sociales un video de una votante de Buttigieg que, citando razones religiosas, pedía cambiar su voto en una asamblea en Iowa tras enterarse de que el candidato tenía una pareja del mismo sexo. Las encuestas siguen mixtas sobre si los estadounidenses se sentirían cómodos con un presidente declarado homosexual.

“Error de codificación”

Con el 62% de los precintos reportados, Buttigieg iba primero en Iowa con el 26,9% del conteo para delegados estatales, la métrica más importante que determina la asignación de delegados que elegirán luego al candidato demócrata en la convención nacional del partido, programada para julio.

Sanders, el senador progresista que se postula como un “socialista democrático” y que había encabezado las encuestas en este estado del Medio Oeste de Estados Unidos, estaba muy cerca con un 25,1%. Warren, otra progresista, obtenía un 18,3%, en tanto Biden, el moderado más conocido en la carrera, cosechaba 15,6%, por encima de la senadora Amy Klobuchar, también centrista, con 12,6%.

Los resultados finales pueden diferir, y no se sabe cuándo se anunciarán, debido a un “error de codificación” que transformó la tradicional primera instancia de la temporada electoral de Estados Unidos en un fiasco.

“Hemos estado trabajando día y noche para asegurarnos de que los resultados sean precisos”, dijo Troy Price, presidente del Partido Demócrata en Iowa, prometiendo el 100% del conteo tan pronto como sea posible.

El conteo parcial se publicó unas 21 horas después de la apertura el lunes de los “caucus”, un peculiar sistema electoral en el que no hay voto secreto.
Los asistentes a estas reuniones en iglesias, gimnasios y escuelas eligen públicamente un candidato, pero si éste no alcanza el umbral de viabilidad del 15%, pueden volver a alinearse con otro con la esperanza de que logre pasar a segunda ronda.

En la realineación, Buttigieg pareció ser particularmente exitoso, atrayendo el apoyo de muchos votantes que lo vieron como su opción favorita después de su candidato fallido, de acuerdo con la información suministrada por el Partido Demócrata de Iowa.