El exsecretario de Estado norteamericano Henry Kissinger visitó a Xi Jinping en Beijing en un viaje que no fue anunciado previamente. En el país asiático se refirieron al estadounidense como un "viejo amigo confiable de China".

A sus 100 años Kissinger visitó nuevamente la capital china, siendo recibido por el presidente de la potencia mundial en la Casa de Huéspedes de Diaoyutai.

Tal como consigna Agencia EFE, este recibimiento contrasta notoriamente con el que tuvieron Janet Yellen y John Kerry, secretaria del Tesoro y enviado especial para Asuntos Climáticos de EE.UU, respectivamente.

De hecho, ninguno de los dos tuvieron reuniones con Xi durante sus recientes viajes a la nación asiática.

Según afirmó el mandatario chino, la visita de Kissinger era sumamente importante para su país, destacando no sólo los 100 años de edad que tiene el exsecretario de Estado sino que también las más de 100 veces que el estadounidense ha visitado China.

Henry Kissinger y Wang Yi
Henry Kissinger y Wang Yi | RFI

“La combinación de estos ‘dos cien’ hace que sea significativa”, detalló.

En tanto, el norteamericano manifestó su “honor por visitar China nuevamente”, añadiendo que las relaciones entre Washington y Beijing están relacionadas con “la paz mundial y el progreso de la sociedad humana”.

En China la figura de Kissinger es sumamente respetada por el rol que tuvo en la normalización de las relaciones entre ambos países hace cuatro décadas.

Portales internacionales como RFI destacan que la reunión se produce en un momento de alta tensión entre estas potencias, especialmente por la situación de Taiwán, uno de los principales puntos de fricción entre los dos países.

Pese al buen ánimo de la cita, Wang Yi, jefe de la Comisión de Asuntos Exteriores del Partido Comunista de China, pidió a Washington que cambie su política de “contención y represión contra China”.

“El desarrollo de China tiene una fuerza interna inevitable. Es imposible tratar de cambiar a China, y más aún contener y reprimir a China”, sostuvo.

Cabe señalar que Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado de EE.UU, aseguró que Washington “estaba consciente” del viaje de Kissinger.

Eso sí, Miller remarcó que estaba en China “por su propia voluntad y no actuando en nombre del gobierno de Estados Unidos”.