Álvaro Quezada, el primer chileno en ganar el Mundial del programa, aseguró que "no tengo problemas con los impuestos" y contó también cuáles son sus planes para el premio millonario.

Durante la tarde de este miércoles, el chileno Álvaro Quezada se coronó como el nuevo ganador del Rosco en Pasapalabra Mundial, ganando en total 34.875.000 millones de pesos. Sin embargo, esa no sería la cifra final que llegará, ya que Quezada no podrá quedarse con todo el dinero.

Esto, debido a que el viñamarino deberá entregar parte del millonario premio al Fisco por un tema de impuestos, que por ley, todos los premios monetarios en el país deben rendir.

De acuerdo a la profesora de Derecho Tributario de la Universidad Finis Terrae, Paola Peirano, este tipo de premios tienen dos tipos de impuestos: el de primera categoría (con una tasa del 25%), así como el impuesto global complementario (tasa progresiva por tramo que hoy llega hasta una tasa de 40%).

“De haber ganado los $34.800.000, a este monto, cuando se lo paguen, se debe afectar con la tasa del impuesto de primera categoría (25%) arrojando una suma a título de impuesto de $8.700.000″, explica la profesional.

Esto, asegura, “se trata de una renta esporádica que deberá declarar y pagar al mes siguiente”. De todas formas, la cifra no quedaría ahí.

“En el mes de abril del año 2023 deberá declarar, y si corresponde, pagar el impuesto global complementario”, menciona, asegurando que “estos $34.800.000 se suman a otros ingresos que haya percibido el año 2022”.

“De haber recibido solo este monto el año 2022, la tasa marginal a aplicar es de 13,5% sobre los $34,8 millones (alrededor de $4 millones). Deben considerar que el impuesto de primera categoría previamente pagado podrá imputarse como crédito contra el global complementario”, explica.

En conversación con BioBioChile, Quezada transparentó que “siempre es bienvenida la plata que no se tiene y no tengo problemas con los impuestos. Si hay que pagarlos, nada que hacer. Es lo que corresponde, no más”.

Asimismo, señaló que con el dinero recibido, espera “arreglar la casa un poco, unas vacaciones bonitas y guardar algo para los estudios de mis hijas”.

Pasapalabra Mundial: Una victoria secreta

Asimismo, Quezada recordó su victoria, apuntando que, el estar a la espera de que se emitiera el capítulo ocultando su triunfo “fue horrible. Menos mal ya se enteraron todos”.

“Cuando gané fue una felicidad tranquila. Yo estaba en Santiago y ellas (su esposa e hijas) en Viña. Las llamé y cuando les conté se pusieron alegres, pero como no podíamos contarle a nadie, toda la emoción se tradujo en miradas cómplices cuando ya estábamos juntos”, recordó.

De igual forma, destacó el apoyo de los otros concursantes de Pasapalabra, apuntando a que “mantenemos contacto por un grupo de WhatsApp y debo decir que una de las mejores cosas de todo esto, es haber tenido la posibilidad de conocerlos. Son todos personas increíbles”.

“Para mí es un lindo honor tener la oportunidad de conocerlos y compartir con ellos cada vez que se puede. Lo mismo con los participantes que han venido de lejos. Son todos bacanes”, sostuvo.

El viñamarino de 47 años aseguró además que no descartaría volver nuevamente al programa, “no por el premio, sino que por la experiencia. Es entretenido y bonito. Estresante, pero lindo”.

“El equipo son personas increíbles y muy acogedoras, siempre con una sonrisa y palabras de aliento. Al final del día, eso es lo que queda. La experiencia y la posibilidad de conocer a una pléyade de personas hermosas”, destacó.

Quezada también quiso apunar a los comentarios que recibió en redes sociales: “me alegra mucho haber podido darle una sonrisa a tanta gente que me apoyó y que de alguna manera se sintió identificada conmigo”, cerró.