En 2005, el nacimiento de Leonor en, la princesa de Asturias fue tan relevante para los españoles, que hubo consenso entre los políticos para realizar una modificación a la Constitución para que pudiera reinar, considerando que la Carta Magna privilegiaba a un varón, aunque no fuera el heredero para asumir el puesto, destacaba EL Mundo.
En esos años, la realeza española gozaba de la aprobación de la comunidad, aunque las cosas han cambiado bastante en los últimos 15 años.
El escándalo del caso Noos que involucró a la infanta Cristina de Borbón y su marido, Iñaki Urdangarin, las imágenes del rey Juan Carlos mientras cazaba elefantes y su posterior abdicación en favor de su hijo Felipe ayudaron a que mermara esa popularidad.
Sin embargo, Leonor es la esperanza de la corona para que vuelva a cautivar a los españoles y se puedan mantener en el palacio de Zarzuela.
Una educación privilegiada, pero más barata que la chilena
Al igual que William y Harry, los hijos del príncipe Carlos, el heredero de la corona inglesa, Leonor nació frente a las cámaras, que también la han seguido en sus momentos más importantes, aunque poco se sabe de su vida privada.
Siempre bajo la protección de sus padres, Felipe y Letizia, reyes de España, comenzó a dar sus primeros pasos en la vida pública cuando era sólo una niña, aunque recién a los 13 años, comenzó a participar en eventos oficiales como la heredera de la corona.
Cuando comenzó el colegio causó sensación, tanto que incluso lanzaron una muñeca replicando su look del primer día de clases y con un vestido rojo, que causó sensación y se agotó inmediatamente, por lo que al año siguiente, la la fábrica de juguetes Antonio Juan S.L., en Onil (Alicante), decidió repetir la experiencia con su hermana menor, la infanta Sofía, consignó Hola.
Cuando era pequeña acompañaba constantemente a sus padres en los actos oficiales, como cuando recibieron a la selección de España tras su victoria en el mundial de Sudáfrica 2010 y, enfundada en la camiseta del país, tomó la copa de las manos de capitán Iker Casillas.
Su educación ha sido privilegiada, pero también muy estricta y apegada al protocolo de la Casa Real. La responsabilidad con la que nació no le permite realizar las cosas que haría cualquier niño o joven, por lo que es constantemente cuidada y controlada por sus padres, quienes aspiran a convertirla a ella y a su hermana en mujeres fuertes, dignas y sin ninguna fragilidad de cara al exterior, consignó Marie Claire.
Es alumna del colegio privado Santa María de los Rosales de Madrid,el mismo al que asistió su padre, cuya colegiatura que equivale a 7 mil euros anuales, equivalente a $6.200.000 aproximadamente, un valor muy por debajo del que se paga en Chile por colegios de elite como The Grange School, donde los apoderados desembolsan aproximadamente 13 millones anuales.
El establecimiento se considera como un establecimiento de lujo, posee enseñanza en cuatro idiomas (alemán, francés, inglés y chino), instalaciones deportivas, equipos tecnológicos de punta, comedor administrado por un jefe de cocina y cuatro cocineros, y —por supuesto— con religión católica.
La quinceañera, que asiste en forma semipresencial y que ya estuvo en cuarentena por casos de covid-19, privilegió las clases de ciencias y se ha destacado por obtener buenas notas, habla inglés con fluidez y ya tomó clases de francés, chino y árabe, aunque sus padres también quieren que esté familiarizada con las lenguas propias del estado español, como el catalán que lo maneja perfectamente, señaló El País.
Además, durante los últimos veranos, luego de tomar días de vacaciones en Mallorca, como acostumbra la Casa Real, la joven asistió junto a su hermana a un campamento en Estados Unidos, con el objetivo de mantener una experiencia formativa en una escuela de verano, replicando lo que, aunque un poco más mayor, realizó su padre, quien estudió durante una temporada Relaciones Internacionales en la Universidad de Georgetown, en Washington, donde fue compañero de periodista chilena, Mónica Pérez.
Hermanas Cómplices
Con motivo del cumpleaños número 50 del rey de España, Felipe VI, El País dio a conocer una grabación de la familia real en la cotidianidad. El camino al colegio, los exámenes y una sopa muy caliente, protagonizaron la escena en la que se mostró a los reyes con sus pequeñas. Si bien, no se les veía tan cómodos, fue una apertura histórica de la Casa Real Española.
El video da cuenta de la complicidad que tienen las hermanas, Leonor y Sofía, quienes constantemente son vistas en público juntas. Sofía, quien lleva su nombre en honor a su abuela, la Reina Emérita, ha sido un apoyo para la princesa que en 2018 comenzó a tener sus primeros actos públicos siguiendo el camino a ser Reina.
En enero de 2018, Sofía acompañó a Leonor cuando recibió de manos de su padre el Toisón de Oro, un “elemento de tradición, continuidad e institucionalización” que dió el punta pie inicial a su carrera como heredera, destacó El País.
Pero también, Sofía ha estado con la heredera en sus intervenciones públicas como su primer discurso, a los 13 años, cuando leyó el arranque de la Constitución, con motivo de los 40 años de la Carta Magna que rige a España o en su segunda intervención, cuando no dudó en mirarla al hablar de la responsabilidad que sus padres les han impuesto a ellas ante la creación de la fundación que lleva su nombre, destacó Vanity Fair.
También, las hermanas están conscientes de la situación que generó el coronavirus en su país y no han dudado al estar juntas en los mensajes de apoyo a la comunidad, así como participar en los actos públicos para las víctimas de la pandemia que afectó profundamente a España.
Las cifras que dejan sus apariciones
La princesa, que constantemente es alabada por su belleza, no pasa desapercibida para el mercado, puesto que cada aparición que realiza, supone un análisis completo de su vestimenta, que muchas veces puede llevar a que una marca sea más conocida y mejore sus ventas.
Con un estilo que han heredado de su madre, Letizia, ha protagonizado una evolución en su estilo a una imagen más adolecente, por lo que dejó de usar las típicas ballerinas que acostumbra a utilizar para cambiarlos por unos tacones sencillos, que llevó recientemente en los Premios Princesa de Asturias 2020.
El modelo de la marca Poète, denominado Mirta, es parte de la colección de otoño-invierno de la firma, costaba 59 euros (casi 53 mil pesos) y se agotó sólo en un par de horas, luego de la presentación de Leonor.
La marca, además registró un número de visitas record que dejó su sitio inactivo por algunos momentos, destacó Yahoo.
El portal explica que a medida que la joven va creciendo, hay un interés por seguir la moda que viste, lo que ha sido una oportunidad para que la la princesa apoye a los comercios nacionales, como es Poète, que se pudo acercar a un público más joven.
La joven, que es el futuro de la realeza española, supone un nuevo aire a una familia que ha protagonizado duros escándalos durante los últimos años, de los que se ha desmarcado junto a su padre… aunque carácter tiene, porque no dudó en quitar de su hombro la mano de su abuela en una misa de Pascua que trajo una polémica ante la discusión que tuvo su madre Letizia y la reina emérita, Sofía.
