Acusado de haber inventado ser víctima de una agresión racista y homofóbica, el actor de televisión Jussie Smollett vio este martes como fueron retirados todos los cargos en su contra, sin explicación y en medio de las críticas de las autoridades de Chicago.

El actor de 36 años, conocido por su papel en la serie dramática “Empire”, se presentó el martes en la corte de Chicago y accedió a perder su fianza a cambio del retiro de los cargos, informaron autoridades y sus abogados.

Smollet celebró el resultado, mientras su familia y abogados insistieron en que había sido víctima, y no perpetrador, de un delito.

“He sido sincero y consistente a todo nivel desde el primer día”,
dijo el actor, que es negro y gay, en una breve conferencia de prensa.

“Este ha sido un momento increíblemente difícil para mí”, agregó. “Honestamente, uno de los peores de mi vida”.

El actor, que tenía una fianza de 100.000 dólares, había rechazado su culpabilidad en los 16 cargos por delitos graves por supuestamente haber planeado un ataque falso para ganar publicidad y aumentar así sus ingresos.

Smollett fue acusado de enviarse una carta amenazante a sí mismo y de contratar a dos conocidos para escenificar un ataque callejero en el centro de Chicago.

Los supuestos agresores, que profirieron insultos racistas y homofóbicos, lanzaron también el eslogan del presidente Donald Trump, “Make America Great Again” (Hagamos a Estados Unidos grande otra vez).

“Después de revisar todos los hechos y circunstancias del caso, incluido el servicio comunitario del Sr. Smollett y el acuerdo de renunciar a su fianza para la ciudad de Chicago, creemos que este resultado es una disposición justa y una resolución apropiada para este caso”, dijo la oficina de la fiscalía local en un comunicado.

Apenas el mes pasado, las autoridades de Chicago aseguraron que tenían pruebas suficientes para respaldar su caso contra el actor y, este martes, tanto el alcalde de la ciudad como el jefe de la policía local -visiblemente enojados- denunciaron la decisión judicial.

“Esto es un encubrimiento de la justicia”, dijo el alcalde Rahm Emanuel en una improvisada rueda de prensa. “El señor Smollett sigue diciendo que es inocente, pasando por encima del Departamento de Policía de Chicago. ¿Cómo se atreve?”, siguió.