Los científicos dicen que este tipo de rocas podrían contener biofirmas potenciales que evidenciarían la presencia de vida microbiana en el planeta.

El rover Perseverance, vehículo espacial de la NASA que actualmente está tomando muestras en Marte, encontró una roca que reafirma la existencia de agua en el planeta rojo y que podría contener evidencia de vida microbiana.

El hallazgo ocurrió en el cráter Jezero, donde los científicos creen que antes existió un enorme lago. El rover recogió muestras de esta roca el 11 de marzo y la llamaron “Bunsen Peak”.

“En pocas palabras, este es el tipo de roca que esperábamos encontrar cuando decidimos investigar el cráter Jezero“, comentó en un comunicado de la NASA, Ken Farley, científico del proyecto Perseverance en Caltech, California.

Pero, ¿por qué la roca es tan especial? Según explicó el científico, gran parte de los minerales que contiene estuvieron sumergidos en agua en el pasado, lo que proporcionará valiosa información.

“Casi todos los minerales de la roca que acabamos de tomar muestras se formaron en agua. En la Tierra, los minerales depositados en agua suelen ser buenos para atrapar y preservar material orgánico antiguo y biofirmas. La roca puede incluso informarnos sobre las condiciones climáticas de Marte que estaban presentes cuando se formó”, dijo.

El Perseverance también encontró posible evidencia de vida en Marte

Los expertos, creen que con esta muestra podrán obtener un rico registro del ambiente de Marte en el pasado, evidencia de un posible entorno habitable.

De hecho, el Perseverance, antes de tomar las muestras, analizó la roca con su Supercam y el espectrómetro de rayos X PIXL, instrumentos con los que determinó que Bunsen Peak está compuesta en un 75% de granos de carbonato cementados entre sí por sílice casi pura.

“La sílice y partes del carbonato parecen microcristalinas, lo que los hace extremadamente buenos para atrapar y preservar signos de vida microbiana que alguna vez pudieron haber vivido en este entorno“, explicó Sandra Siljeström, científica de Perseverance de los Institutos de Investigación de Suecia (RISE).

“Eso hace que esta muestra sea excelente para estudios de biofirmas si se devuelve a la Tierra. Además, la muestra podría ser uno de los núcleos más antiguos recopilados hasta ahora por Perseverance, y eso es importante porque Marte estaba en su momento más habitable al principio de su historia”, planteó.

Pese a ello, los científicos advierten que las biofirmas potenciales podrían significar evidencia de vida microbiana, pero también podrían haberse generado sin la presencia de vida.

“Todavía estamos explorando el margen y recopilando datos, pero los resultados hasta ahora pueden respaldar nuestra hipótesis de que las rocas aquí se formaron a lo largo de las orillas de un antiguo lago”, añadió Briony Horgan, científica de Perseverance de la Universidad Purdue, en West Lafayette, Indiana.

Las muestras viajarán a la Tierra con la misión Mars Sample Return, que partirá en 2026.