“Desmitificar a la vieja escuela que afirma que con la exigencia autodestructiva se forman mejor los estudiantes para lograr buenos resultados artísticos”. Este es uno de los objetivos del video-conferencia “Autocuidado del Performer” que, para este fin de semana, organiza Rosario Gómez, actriz y pedagoga teatral.

A pocos días de este primer evento sobre el tema, asegura que se usan metodologías que llevan “a olvidarse de uno mismo, a tal nivel, que provocan enfermedades a nivel psicofísico y emocional”.

Y no deja de tener razón: una encuesta reciente a un centenar de artistas escénicos (actores, actrices, bailarines, músicos) arroja estados de salud que coinciden con el concepto de “enfermedades profesionales”.

R. Gómez
R. Gómez

Algunas son: colon Irritable, tendinitis, cefalea, migrañas, stress, lesiones articulares, ansiedad, lumbago crónico, ego (falta de humildad), neurosis, somatización, hipotiroidismo (asociado a las emociones), narcisismo, callosidades, tensión cervical, dolores musculares y de articulaciones, ampollas de contacto, dolores de espalda y pies, insomnio, inflamación de cuerdas vocales.

Todo esto, agrega Rosario Gómez, refleja “una necesidad imperiosa: replantearnos lo que hacemos y por qué hacemos lo que hacemos desde la pedagogía teatral”.

Optimizar rendimiento

¿Por qué y qué alcance tiene esa nueva mirada a las artes escénicas y la pedagogia teatral?
“En mi caso, apostar a nueva mirada del entrenamiento del performer -actor, actriz, bailarín, músico- para optimizar su rendimiento agregando otras disciplinas que NO se abordan en las escuelas de teatro.

“Estoy convencida que los artistas en general necesitamos autocuidado psico-corporal y emocional con técnicas ejercicios y terapias que contribuyan a transformar conciencias, para conectarnos mejor como seres humanos y artistas”.

Si lo propones para la escuela, ¿cuál sería el rol del docente?
“Tener conocimientos, conciencia y alertar sobre las enfermedades es una antigua preocupación mía no sólo respecto de los artistas, sino que también en relación a todas las personas.

“Es lo que desarrollaremos en la conferencia Autocuidado del Performer con la participacion de Ricardo Herrera (actor, docente, director teatral), Mario Ossandón (bailarín, actor), Lorera Capetillo (actriz, locutora radial), Izidor Leitinger (músico, profesor de voz), Emilia del Pedregal (psicóloga, investigadora teatral)”.

R. Gómez
R. Gómez

¿Incluirá actividades prácticas?
“No, cada uno abordará desde su especialidad qué técnicas, herramientas y terapias pueden servir para el Autocuidado, tener mejores resultados y mejor calidad de vida no sólo en este contexto de pandemia, sino como estilo de vida…

“Es decir, planteamos tener autoconciencia sobre cómo afectan los patrones emocionales, creencias, juicios, etc. en nuestro trabajo y en la vida personal. Por ejemplo, por qué y cómo nos lesionamos durante los ensayos, qué factores personales, ambientales, culturales, familiares influyen en nuestra actividad…

“Todo esto es un complemento para ver la realidad de los artistas desde una mirada más global, en tanto que el artista es persona que trabaja con su cuerpo-mente-emoción”.

Enfernedades y

sanación

Según Rosario Gómez, las enfermedades psicofísicas y emocionales son recurrentes entre los artistas escénicos, tanto en su período de formación en las escuelas, como en los ensayos y trabajo profesional.

En este sentido, propone que las típicas patologías músculo-esqueléticas, la incertidumbre laboral, la mitificación del dolor y sufrimiento para rendir más, el peso de docentes y directores en la carrera del artista y la influencia de las escuelas europeas en los métodos de entrenamiento del performer, entre otros estados, se confronten y/o se complementen con la neurociencia y otras técnicas y métodos de autocuidado psicofisico que optimizan la creatividad, la imaginacion y el rendimiento del performer.

¿Implica superar enfoques conceptuales y técnicas de la academia?
“No, la Biomecánica de Vsévolod Meyerhold (1874-1940, Rusia), junto con la investigación acerca de la voz y la corporalidad de Jerzy Grotowski (1933-1999, Polonia) y la antropología que incorporó a sus entrenamientos Eugenio Barba (1936, Italia) son grandes aportes.

“Creo, sin embargo, que la propuesta de Meyerhold no se profundizó como estudio, sino que se repitió como sistema de entrenamiento sin ir más allá en sus principios de la anatomía humana: en cierto modo se congeló la investigación, excepto Bertolt Brecht (1898-1956, Alemania), que teorizó el gestus propuesto por Meyerhold…

“El tema es la profundización de estas ciencias. Estoy segura que si Meyerhold estuviera vivo incorporaría, por ejemplo, las cadenas miofasciales, la reeducación postural global… Sobre todo los profesores de Movimiento debieran estudiar estos temas, porque ¿cómo optimizas a un alumno con escoliosis o con una lordosis u otra patología?”

¿Lo homogéneo versus diversidad personal en la formación?
“Claro, todos los entrenamientos son homogéneos y eso no debe ser… Hay muchos ejercicios específicos para cada caso en particular… Creo que el único maestro que me enseñó en parte a conocer en profundidad mi cuerpo fue Amilcar Borges: incorporó muchos principios que para mí fueron un trampolín para seguir explorando el entrenamiento del performer.

“El workcenter de Jerzy Grotowski también fue un paso muy importante, porque me conectó con los cantos vibratorios o Cantos Cuerpo, pero aun así hay mucho que estudiar: así como en la puesta en escena se RE CREA constantemente, el entrenamiento del performer también necesita una RE VISION permanente. En Chile tenemos escuelas de teatro, pero no dirigidas al performer”.

Vía Zoom. Conferencia Autocuidado del Performer. Sábado 15 agosto, 17.30 horas. Gratuito. Confirmar asistencia en elorigenlab@gmail.com