Tras el nuevo hallazgo de ballenas muertas entre el golfo Corcovado y la isla Madre de Dios, se ha elaborado una misión que será puesta en marcha a fines de abril, donde participarán 15 instituciones. Sernapesca expondrá la información recopilada sobre los varamientos en cumbre mundial.

Durante la semana pasada se desarrolló una sesión entre científicos internacionales por los hechos registrados entre las regiones de Aysén y Magallanes en 2015, donde murieron 337 ballenas sei, o como llaman los profesionales, Balaenoptera borealis.

Según consignó La Tercera, en la instancia el miembro de la Comisión de Mamíferos Marinos de EE.UU., Frances Gulland, señaló que “sí, es el mayor varamiento en la historia moderna“.

En el encuentro organizado por Sernapesca, el profesional, representante del organismo que asesora a Barack Obama, explicó que “son muchas, y difícil de investigar en un área tan remota, pero queremos ayudar”.

Las muertes continúan

A lo largo del verano 2016 se llevaron a cabo dos misiones en el sur del país, una desarrollada por Sernapesca y la segunda investigadores privados. En ambas expediciones se registraron mamíferos muertos.

Al respecto, el organismo detalló que en febrero se avistaron dos ballenas muertas y confirmó al mismo medio que, este miércoles fueron siete los ejemplares encontrados varados entre el golfo Corcovado y la isla Madre de Dios.

Mauricio Ulloa, jefe de la Unidad de Rescate Animal de Sernapesca, explicó que las indagatorias han esclarecido que las muertes no son originadas por acción del hombre.

Fiscalía

Pedro Poblete es el fiscal que recopila los casos en Aysén, quien explicó que los nuevos avistamientos tendrían “una data relativamente reciente”.

Según los datos que ha aportado Vreni Häussermann de la Fundación Huinay a la investigación, los nuevos casos ascienden a 20 hasta la fecha. El profesional advirtió que aún se debe determinar si la causa de las muertes ha sido provocada por marea roja o por otra razón.

Ante lo cual, el profesional aseguró que “estamos estudiando el ecosistema más en detalle para entender que está pasando: ballenas vivas, mortalidades futuras, monitoreo de marea roja, corrientes, plancton, etc”.

Carolina Simon Gutstein del Consejo de Monumentos Nacionales, sostiene la misma hipótesis que Häussermann, sobre que las toxinas de la marea roja registrada en el último periodo habrían afectado a los mamíferos marinos.

Ulloa desde Sernapesca, coincidió con Häussermann y Simon, pero advirtió que “nada de esto es concluyente aún, porque estamos hablando de una mortalidad de más de 300 ballenas y hemos comprobado la presencia de esta toxina en no más allá de cuatro ejemplares”.

Expedición

La teoría ha sido compartida por otros científicos, por lo que a fines de abril viajarán hasta la zona de avistamiento, iniciativa que será financiada por Blue Foundation y el apoyo de Navimag.

La expedición contará con la participación de 15 instituciones, sumadas las universidades Santo Tomás, Católica de Valparaíso, Austral y Magallanes. Mientras que desde el extranjero viajarán la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (Noaa) y la Association of Marine Science, de Escocia.

Con los antecedentes que serán recopilados, el representante de Sernapesca representará por primera vez el caso ante la Comisión Ballenera Internacional en junio. Mientras actualmente, comentó, se esta desarrollando una Red de Varamientos de manera legal, para que los recursos sean dispuestos de forma inmediata al momento de necesitar viajar a las zonas afectadas, y no verses sometidos a largas esperas por un barco.