Estados Unidos advirtió este martes sobre los “riesgos potenciales”, mientras que el gobierno británico desaconsejó a sus ciudadanos viajar a Bruselas tras los atentados contra el aeropuerto y el metro que dejaron unos treinta muertos.

“Las autoridades belgas desaconsejan viajar a Bruselas. Les aconsejamos que sigan las instrucciones de las autoridades de seguridad belgas”, dijo el Ministerio británico de Asuntos Exteriores.

La portavoz del primer ministro David Cameron recomendó no viajar a la capital belga salvo “razón imperativa”, una directriz muy poco habitual para ciudades o países europeos.

En Estados Unidos, en tanto, el Departamento de Estado alertó que “grupos terroristas continúan planeando ataques a corto plazo en toda Europa, teniendo como objetivos eventos deportivos, sitios turísticos, restaurantes y el transporte”, agregó el Departamento en su alerta de viajes, que expira el 20 de junio.

Varios estadounidenses han sido confirmados como heridos en los ataques de Bruselas, entre ellos cuatro misioneros mormones, un aviador y sus familiares.

Los tres misioneros, provenientes del estado de Utah, fueron gravemente heridos en las explosiones registradas en el aeropuerto de la capital belga, según la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Acompañaban a un colega francés que viajaba a EEUU y que también resultó herido.

“Trabajamos estrechamente con nuestros aliados y seguiremos compartiendo información con nuestros socios europeos que ayude a identificar y hacer frente a las amenazas terroristas”, dijo el Departamento de Estado.