Grecia llamó este jueves a consultas a su embajadora en Austria por los desacuerdos entre ambos países sobre la gestión de la llegada masiva de migrantes, indicó un comunicado del Gobierno.

“En virtud de una decisión del ministro griego de Relaciones Exteriores, Nikos Kotzias, la embajadora de Grecia en Viena, fue llamada a consultas para conservar las buenas relaciones entre los países y los pueblos de Grecia y Austria“, indica el texto.

Grecia había protestado frente a Viena y la Unión Europea debido a refuerzo “unilateral” de los controles en las fronteras de los países de los Balcanes, lo que lleva a que los migrantes permanezcan en territorio griego.

En el puesto fronterizo de Idomeni, entre Grecia y Macedonia, 3.500 migrantes esperaban el jueves entrar en Macedonia, que redujo la cantidad de migrantes autorizados a entrar en su territorio.

El miércoles 250 personas lograron cruzar de Grecia a Macedonia, mientras que el jueves al mediodía, sólo 100 personas habían sido autorizadas a entrar en Macedonia.

El primer ministro griego Alexis Tsipras amenazó el miércoles con rechazar cualquier acuerdo europeo si el peso de la crisis migratoria “no es repartido de manera proporcional” entre los países miembros de la Unión Europea (UE).

Grecia no consentirá ningún acuerdo sin el reparto del peso y las responsabilidades (de la crisis migratoria) no se hace de manera proporcional” entre los países de la UE, afirmó Tsipras durante un debate parlamentario en Atenas.