Luego de que la UDI solicitara que se invite a los ministros, que participaron en la campaña de la presidenta Michelle Bachelet, a la Comisión Investigadora que revisará el gasto electoral desde el año 2005, el Gobierno pidió que se deje funcionar a las instituciones que están investigando el Caso Penta.
El ministro del interior, Rodrigo Peñailillo, hizo un llamado a dejar que las instituciones funcionen en las investigaciones -tanto penales como políticas- que se están realizando por el Caso Penta y por los cuestionamientos que se han generado al financiamiento de las campañas electorales.
Peñailillo, aseguró que “los funcionarios públicos tenemos la obligación de asistir cuando la Cámara de Diputados, o la comisión investigadora lo pueda solicitar”, aunque pidió dejar que las investigaciones operen de forma autónoma.
La ofensiva de la UDI nació en respuesta a la creación de otra comisión investigadora, que fue impulsada por la Nueva Mayoría y que tiene como misión fiscalizar las implicaciones políticas del Caso Penta, que apuntan principalmente a parlamentarios gremialistas.
Desde el pacto oficialista, Osvaldo Andrade aseguró que la UDI se tiene que preocupar de sus problemas internos antes de hacer llamados a personeros del Gobierno.
Según afirmó el jefe de bancada de la UDI, Felipe Ward, serían cuatro los miembros del gabinete que llamarían a la comisión: Rodrigo Peñailillo, Javiera Blanco, Álvaro Elizalde y Alberto Arenas.
Ward hizo un llamado a que en el oficialismo no olviden los episodios que los involucraron en los sobre sueldos, refiriéndose al titular de justicia, José Antonio Gómez y al diputado Andrade.
En la Cámara se evaluará la próxima semana si es que las dos comisiones relacionadas con el Caso Penta se fusionan.