Durante el periodo menstrual no es raro sentirse cansada, hinchada o de mal humor debido a las fluctuaciones hormonales. Sin embargo, estos niveles generalmente se estabilizan después de un par de días. El problema surge cuando estos malestares se mantienen durante todo el mes.

Según Alyssa Dweck, gineco-obstetra del Mount Kisco Medical Group en Nueva York (Estados Unidos), existen diversos factores, como el estrés y la ansiedad, que pueden hacer que este desorden hormonal se vuelva permanente.

Por ello, la profesional expuso en la revista especializada en salud Health.com, algunas señales que podrían ser indicio de que tus hormonas están fuera de control.

1. Fatiga permanente

El agotamiento tiene muchas posibles causas, pero puede tratarse de un tema hormonal. “Si estás cansada después de una semana de exámenes finales o de trasnochar en el trabajo, entonces probablemente estás muy bien. Pero si constantemente te sientes desgastada y notas un aumento de peso, fluctuaciones en tu apetito y un cambio en tus movimientos intestinales, podría ser un signo de una tiroides poco activa”, explica Dweck.

Y es que si bien todos nos cansamos alguna vez, si tu agotamiento no tiene lógica, debes consultar a un especialista.

2. Cambios en la piel

Los granos pueden aparecer por no sacarse el maquillaje algunas noches, pero si aparecen pese a que tomas los cuidados correspondientes, debes analizar la situación. “El acné del adulto o acné quístico, que aparece en la mitad inferior de su rostro, podrían sugerir un alto nivel de testosterona”, indica Dweck, quien añade que aunque no es un problema que amenace la existencia, la calidad de vida y la autoestima pueden verse afectadas. Si es tu caso, puedes acudir a un médico para que te recete medicamentos para estabilizar tus niveles hormonales y mejorar tu piel.

3. Vellosidades abundantes e inesperadas

“Si de repente te aparecen pelos en el mentón gruesos, vellos oscuros en el pecho, la espalda o los brazos, podría ser indicativo de un tumor secretor de testosterona”, explica Dweck, quien llama a no asustarse, pues este tipo de tumores son raros, y se pueden tratar con medicamentos o cirugía.

4. Periodos menstruales irregulares

Un ciclo menstrual irregular puede ser causado por diversos factores tales como el estrés, problemas de tiroides, niveles bajos de estrógeno o síndrome de ovario poliquístico (SOP).

“Un sello distintivo de síndrome de ovario poliquístico son los períodos irregulares o ausentes, pero también podría presentarse con dificultades para perder peso o crecimiento anormales del pelo”, dice Dweck, añadiendo que en general, este padecimiento se controla a través de la dieta, el ejercicio y las píldoras anticonceptivas, pero siempre un médico debe guiar el tratamiento.

5. Sudores nocturnos

Si tu dormitorio no es particularmente cálido, pero sueles despertar sudorosa y sintiendo mucho calor, puede que tus niveles de estrógeno estén más bajos y tu ovulación sea más infrecuente. A esto se le llama perimenopausia y “puede ocurrir hasta 10 años antes de que siquiera estés cerca de la edad de la menopausia”, señala Dweck.

“Hay una buena probabilidad de que el fantasma de tu sudoración en realidad pueda ser una menopausia temprana”, dice Dweck, quien recomienda visitar al médico para asegurarse de que no sea algo más serio.