Este lunes, la Corte Internacional de Justicia de La Haya dio a conocer las conclusiones de la demanda marítima de Perú contra Chile tras seis años de litigio. En la oportunidad, la CIJ determinó acoger parte de la demanda peruana y fijar nuevos límites marítimos.
A raíz de esto, en Arica se vivieron momentos de pesar entre los pescadores, ya que según explicaron, esta determinación los perjudica directamente en la obtención de algunos recursos.
Tras el fallo de La Haya, los pescadores señalaron que la determinación no es tan grave como lo pensaron, sin embargo aún tienen dudas respecto a la altura de qué ciudad intersectará la línea equidistante proyectada desde las 80 millas.
“No es menor lo que hemos perdido, pero no es lo que pensábamos íbamos a perder, hemos perdido mar territorial pero no es lo peor”, indicó Sergio Guerrero, presidente del sindicato de pescadores artesanales de Arica. A esto sumó una duda: “Al llegar a las 200 millas, la bisectriz ¿a qué altura llega?”.
“Felizmente todos los que están en la pesca de la anchoa, quedan libres, los que sí estarían sufriendo las consecuencias son los recursos migratorios que son el bacalao, la palometa, pez espada y marraco, esas especies se capturan en la zona que le dieron a Perú”, indicó.
Según señalaron, entre un 25 a un 35% se ven afectados con ese nuevo límite de los pescadores artesanales. Ante ello dijo que “le pedimos al Estado una medida de mitigación y trabajar en una mesa de trabajo”.
Por esta razón, marcharon hasta el Gobierno Regional para demandar una reunión con el ministro Andrés Chadwick, cita que se produjo en medio de cánticos de carácter xenófobo.
Al término de este encuentro, Chadwick le bajó el perfil al territorio marítimo perdido y adelantó una reunión para este miércoles, en Santiago.
Industriales
En la misma cita, el presidente del Sindicato de Tripulantes Industriales de Arica, Miguel Ahumada, comentó que se acordó una reunión con el ministro de Economía en la capital. Allí esperan discutir un programa de compensación a los afectados.
Asimismo, pidieron que el Estado dé “un golpe a la mesa” para evitar nuevas demandas, ello ante el que se vislumbra ocurra con Bolivia.
En tanto, Sergio Vera, presidente de la Federación de Tripulantes de Chile, estimó que les afecta “mucho” el nuevo límite marítimo, ya que son ellos los que pescaban en esa zona.
Vera detalló que “alrededor de unos 1.500 tripulantes” quedan con efecto negativo, ya que hay que sumar a los de Arica, los de Iquique, donde también acudían en la zona hoy entregada para explotación económica al Perú, en que hay anchoveta y caballa.
