La alemana Wintershall, controlada por el grupo BASF, hará una inversión global de 3.350 millones de dólares para la explotación de hidrocarburos derivados de esquisto (shale) en Vaca Muerta, sur argentino, una de las mayores reservas de petróleo no convencional del mundo.

Jorge Sapag, gobernador de la provincia de Neuquén, donde se localiza Vaca Muerta, y directivos de Wintershall firmaron el lunes un acuerdo en Alemania que prevé “una inversión global de 3.350 millones de dólares (en diez años) para el desarrollo en esa zona hidrocarburífera”, informó este martes el gobierno del distrito.

En la primera etapa de exploración, la compañía alemana aportará unos 150 millones de dólares para la perforación de seis pozos (dos verticales y cuatro horizontales) en dos años, explicó el gobierno de Neuquén.

La iniciativa se llevará a cabo en una superficie de 97 km2 en Vaca Muerta, un yacimiento que ocupa 30.000 km2 en total. Una zona donde las comunidades mapuche que allí habitan han expresado su rotundo rechazo a la explotación petrolera, por vulnerar sus derechos territoriales, según denuncian.

También por Vaca Muerta, la petrolera estatal argentina YPF firmó en julio pasado un acuerdo con la estadounidense Chevron que prevé una inversión inicial de 1.240 millones de dólares.

Argentina apuesta a la explotación de hidrocarburos a partir de esquisto bituminoso para recuperar el autoabastecimiento de energía. El país destinó unos 12.000 millones de dólares a importación de hidrocarburos en 2012 y se prevé una cifra similar para este año.