La machi del Roble Carimallín en Río Bueno, Millaray Huichalaf, recluida en la cárcel de Valdivia por su presunta responsabilidad en el atentado incendiario al Fundo Pisu Pisué, insistió en su inocencia agregando que su detención es política.
La autoridad tradicional atribuyó su procesamiento y detención a la lucha permanente que ha desarrollado en defensa del territorio y del espacio ceremonial y no por que existan antecedentes que la responsabilicen del atentado, sino más bien porque se da en un contexto social y político.
La machi insistió en que no existen antecedentes suficientes para mantener encarcelados a ella y sus compañeros, asegurando que lo único que se persigue con esto es criminalizar y estigmatizar a las comunidades indígenas.
Aseveró que si bien la cultura mapuche está en contra del sistema capitalista, tienen todo el derecho a seguir existiendo.
La machi, que el próximo 30 de mayo cumplirá 4 meses recluida, realizo un llamado al gobierno a bajar la presión que se ejercen contra las comunidades porque a su juicio no es la forma de terminar con los conflictos, insistiendo en que mientras las empresas llegue a usurpar sus espacios, van a continuar los problemas.
Millaray Huichalaf argumentó que ni siquiera se trata de grandes extensiones de terrenos por las cuales luchan en el sector de Maihue Carimallín, sino que por el denominado “Kintuante”, espacio donde convergen los cuatros puntos cardinales, transformándose en la fuerza espiritual para las 21 comunidades del sector y que corre el riesgo de ser inundado con la instalación de la central Pilmaiquén.
