Las principales bolsas europeas volvían a caer este viernes pese a la promesa del G20 de una respuesta “fuerte y coordinada” a la crisis, tras una jornada negra debido a la incertidumbre general sobre la economía mundial.

Tras las caídas de alrededor de 5% de la víspera, los mercados abrieron con un ligero rebote antes de volver claramente al rojo. Fráncfort perdía 2,77%, París 2,35%, Madrid 1,54% y Milán 1,44%.

El G20, que reúne a las principales economías desarrolladas y emergentes, se comprometió el jueves a aportar una respuesta “fuerte y coordinada” a los desafíos que enfrenta la economía mundial en la cumbre prevista los próximos 3 y 4 de noviembre en la ciudad francesa de Cannes.

Los ministros de Finanzas y dirigentes de bancos centrales jefes de bancos prometieron un “plan de acción colectivo ambicioso” para “respaldar el crecimiento” y “aplicar planes de consolidación presupuestaria creíbles”, así como “hacer lo necesario para que los bancos dispongan de un capital adecuado”, en una declaración publicada al término de una cena de trabajo.

“Los ministros de Finanzas del G20 desaprovecharon una excelente oportunidad para calmar a los mercados”, estimó Manoj Ladwa, analista de ETX Capital. “Subrayar la obvia fragilidad del sistema financiero sin medidas claras para evitar un colapso generalmente no infunde confianza a los inversores”, agregó.

A esta falta de medidas concretas se suman otros temores como la crisis de la deuda europea, y en particular a una posible suspensión de pagos de Grecia, el riesgo de recesión mundial debido a una clara desaceleración de las principales economías desarrolladas y los problemas de los bancos, sobre todo los más expuestos a la deuda griega.

Las bolsas asiáticas cerraron previamente con fuertes caídas por segunda sesión consecutiva. Hong Kong perdió otro 1,32% para terminar a a 17.911,95 puntos, un nuevo mínimo desde julio de 2009.

Seúl perdió 5,73% y Shanghai 0,41%, mientras que Tokio limitó los daños al ser este viernes festivo en Japón.

En Asia, varios bancos centrales, como los de Indonesia y Filipinas, y según informaciones sin confirmar posiblemente también los de Corea del Sur e India, intervinieron en favor de sus monedas debilitadas ante la subida del dólar.

Por su parte el maltrecho euro trataba de repuntar tras haber tocado la víspera su mínimo desde enero ante el dólar y en 10 años ante el yen.

La moneda única europea seguía sin superar la barrera psicológica de 1,3455, contra 1,3466 este jueves, cuando llegó a caer durante la jornada a 1,3385 dólares

El euro se mantenía prácticamente estable ante el yen, a 102,62 yenes por unidad, contra 102,60 la noche del jueves.

Por último el oro, otro valor refugio tradicional pero que cotiza en dólares, perdía otros alrededor de 30 dólares este viernes, cuando se cotizaba a 1.707,90 la onza, tras haber perdido ya 90 dólares el jueves.

Desde que estableció su máximo histórico el pasado 6 de septiembre, a 1.921,15, el precioso metal amarillo ha perdido el 12,5% de su valor.

En cambio, el petróleo repuntaba al día siguiente de haber perdido más de 5 dólares. El barril de Brent del mar del Norte para entrega en noviembre valía 106,14 dólares en el Intercontinental Exchange (ICE) de Londres, en alza de 65 centavos con respecto al cierre del jueves.

En las transacciones electrónicas previas a la apertura en el New York Mercantile Exchange, el barril de “light sweet crude” (WTI) para entrega en el mismo mes ganaba 35 centavos, a 80,86 dólares.