La segunda parte de la comedia “Hangover” llega el viernes a las salas de Norteamérica con una historia que responde a la misma fórmula que la primera: el reencuentro de un grupo de amigos antes de una boda -que esta vez se festeja en Tailandia – donde el alcohol y otras sustancias desatan una sucesión de locuras propias de Hollywood.
“Sin arrepentimientos” fue la frase más usada por Todd Phillips, director de esta película, durante una conferencia de prensa en Beverly Hills para hablar de esta trama repleta de chistes escatológicos y de género, además de alguna provocación racial.
La película que protagonizan Bradley Cooper, Zach Galifianakis y Ed Helms, muestra los problemas en los que se meten los personajes tras un desmadre de sexo y drogas que no logran recordar.
En 2009 se convirtió en la comedia revelación del año y recaudó más de 460 millones de dólares en el mundo.
“The Hangover Part II” cambia Las Vegas por Tailandia y además del elenco principal vuelven a aparecer Ken Jeong, en la piel de un mafioso, y Mike Tyson.
El viernes, cuando empieza el fin de semana largo en Estados Unidos por el Memorial Day (Día de los Caídos), “Hangover 2″ peleará la taquilla con la secuela de la cinta animada “Kung Fu Panda”. Ambas intentarán destronar a la exitosa cuarta entrega de “Piratas del Caribe”.
El director Phillips se negó a confirmar si una tercera parte de “Hangover” va a depender del desempeño en la venta de entradas de la película, pero confesó que está abierto a convertir la saga en una trilogía.
“La tercera sería una final. Lo que más puedo decir al respecto es eso, y lo que tengo en mente es no ir siguiendo un plan, pero más o menos esa es mi idea”, dijo Phillips.
