El presidente sudcoreano, en su primera intervención televisada desde el bombardeo por Pyongyang de una isla sudcoreana, no comentó este lunes la propuesta de Pekín de organizar una reunión urgente sobre la crisis en la península coreana.

Pekín ha propuesto reunir rápidamente a los seis países implicados en las negociaciones sobre el programa nuclear de Corea del Norte, tras los enfrentamientos militares de la semana pasada entre las dos Coreas.

En un solemne discurso de siete minutos, el presidente Lee Myung-bak, prometió este lunes que Corea del Norte iba a “pagar” por sus disparos de artillería “inhumanos”, que dejaron cuatro personas muertas el pasado martes en la isla de Yeonpyeong.

Según Lee Nae-Young, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Corea, el hecho de que Lee no mencionara la propuesta de China en su discurso significa que tácitamente la rechaza.

Corea del Sur había ya afirmado el domingo que la propuesta de China debía ser considerada “con la mayor prudencia”.

Una tal reunión debe “ser encarada con la mayor prudencia”, en vista de la revelación del programa de enriquecimiento de uranio de Pyongyang y su ataque de esta semana contra una isla sudcoreana, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur.

Tokio también reaccionó con cautela ante la propuesta y Washington se negó a comentarla el domingo.