Dos presuntos miembros de ETA detenidos la semana pasada dijeron durante un interrogatorio haber sido entrenados en Venezuela en el verano boreal de 2008, lo que llevó al gobierno español a pedir información adicional a Caracas en el marco de su colaboración antiterrorista.

Juan Carlos Besance Zugasti y Xavier Atristain Gorosábel, que este lunes fueron enviados a prisión provisional, indicaron en un interrogatorio ante la Guardia Civil que siguieron “cursillos de formación” en julio y agosto de 2008 en Venezuela, según un auto judicial difundido este lunes.

La publicación del auto ha llevado a España a pedir más información a Venezuela “en el marco de la cooperación bilateral en la lucha antiterrorista”, que mantienen ambos países, dijeron fuentes de la cancillería española.

Un comunicado del Ministerio venezolano de Relaciones Exteriores salió al paso afirmando que el Gobierno venezolano “refuta y desmiente cualquier aseveración que pretenda vincularlo con la organización terrorista ETA, cuyas actividades rechaza sin paliativos”.

Además, el comunicado garantiza que las instancias de cooperación judicial y policial entre ambos Estados se pueden activar si Madrid lo requiere, en respuesta a la petición de información adicional emitida por España.

El gobierno venezolano “deplora que cierta prensa española, junto a un puñado de parlamentarios nostálgicos de la dictadura franquista, otorguen crédito a las insinuaciones de dos antisociales con el fin de enturbiar las relaciones de respeto y de mutuo beneficio” entre ambos países, consideró el texto recibido por la AFP.

Estos hechos “forman parte de esta orquesta que sigue sonando contra la revolución bolivariana en los cuatro puntos cardinales de este planeta”, aseguró a su vez el presidente venezolano Hugo Chávez, en una intervención telefónica en el canal estatal de televisión VTV.

Según el auto judicial, Besance y Atristain, miembros del comando “Imanol” creado en 2005, recibieron primero “cursillos de formación” en Francia sobre “métodos de encriptación, desmontaje y limpieza de armas y posiciones de tiro” en la localidad de Luz-Saint-Sauveur (suroeste), antes de “continuar los cursillos de formación” en Venezuela en julio y agosto de 2008.

Allí contactaron con “dos personas identificadas como Arturo Cubillas Fontán y José Lorenzo Ayestarán Legorburu, personas que imparten los cursillos”, y luego regresaron a España, reza el auto del juez Ismael Moreno, de la Audiencia Nacional, principal instancia judicial española.

La justicia española sospecha desde hace meses de que Venezuela sirve de escondite a miembros de ETA, lo que ha llevado a la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), una de las principales organizaciones de víctimas del terrorismo española a pedir que Madrid rompa relaciones con Venezuela “si este país no deja de entrenar a etarras”.

En marzo de este año, un juez español ordenó detener a 12 miembros de ETA y las FARC por su supuesta colaboración y el intento de asesinato en España de personalidades colombianas. La justicia señaló además que la colaboración entre ambas organizaciones contó con “cooperación gubernamental” venezolana.

Ello desató un incidente diplomático y el gobierno del presidente de Hugo Chávez negó esa colaboración.

Chávez llegó a declarar que los “etarras” residentes en Venezuela, varios de los cuales llegaron a Venezuela en 1989 en virtud de un acuerdo con España, “no están participando en ninguna actividad terrorista”.

Entre los 12 está Arturo Cubillas, residente en Venezuela, que ha sido “responsable del colectivo de ETA en esa zona de América desde el año 1999, encargándose de coordinar las relaciones con las FARC y la participación de integrantes de la ETA en cursillos de explosivos”, indicó un juez español en marzo.

Cubillas fue nombrado en 2005 “director adscrito a la Oficina de Administración y Servicios del ministerio de Agricultura y Tierras de Venezuela”, según la justicia española.

Venezuela recibió en marzo la orden de detención de la justicia española contra Cubillas, que tiene nacionalidad venezolana, e indicó que investigaría el caso.

ETA, considerada organización terrorista por la Unión Europea (UE), es responsable de la muerte de 829 personas en más de 50 años de violencia por la independencia del País Vasco.

Atristain y Besance fueron detenidos el miércoles junto con el hermano de éste, Jesús María Besance -posteriormente liberado-, en una operación en la que el Ministerio del Interior español anunció la desarticulación de un comando de ETA.