La navegante estadounidense Abby Sunderland, de 16 años y quien quedó a la deriva en el océano Indico en un intento por dar la vuelta el mundo en solitario, llegó a su casa en California y narró su hazaña este martes.

Cinco meses después de zarpar del puerto de Marina del Rey, suroeste de Los Angeles, para cumplir un récord dándole una vuelta al mundo en solitario en su velero, Sunderland llegó al mismo lugar pero en avión.

La joven fue rescatada hace dos semanas por un barco francés frente a Madagascar, donde una tormenta acabó con su sueño.

“Por supuesto que hubo momentos en que estuve aterrorizada”, dijo Abby Sunderland en una conferencia de prensa acompañada por su hermano Zac, de 17 años, que en julio de 2009 cumplió un récord al hacer la misma travesía en su velero en solitario.

En Estados Unidos los comentaristas y expertos en navegación han criticado a los padres de esta familia cristiana de ocho hijos, por haber permitido a una menor de edad iniciar este viaje.

“Hemos estado expuestos a intensas críticas personales por gente que no nos conoce”, dijo un comunicado de los padres de estos jóvenes, Laurence y Maryanne Sunderland.

“La mayoría ni siquiera nos conoce. Escuchar la intensidad de odio personal arrojado por algunos en los medios de comunicación y en blogs fue impactante para nosotros. Se cruzó la línea de la decencia humana”, agregaron los padres.