Israel enfrenta una campaña mundial para negarle legitimidad, destinada a aislarlo y a ocultar su carácter judío y democrático, señala un informe presentado al gabinete israelí.

Afirmar que hay en Israel un carácter demoníaco “tiene la finalidad de negar su legitimidad y presentarlo como una entidad colonial asociada a prácticas nazis, al apartheid o al racismo”, afirma este informe del Instituto de Investigación Reut de Tel Aviv sobre las cuestiones económicas y sociales, que fue presentado el jueves al gobierno de Benjamin Netanyahu.

Este informe, del cual la AFP recibió una copia, critica fundamentalmente “manifestaciones hostiles a los representantes israelíes en universidades extranjeras o en los estadios, llamados a boicotear los productos fabricados en Israel, o incluso intentos destinados a detener y llevar ante la justicia en el extranjero a los responsables” del Estado hebreo.

Dicho informe acusa fundamentalmente a una red mundial de individuos, asociaciones y organizaciones no gubernamentales pro palestinas, árabes o musulmanas, a menudo vinculadas a la izquierda, “cuyo denominador común es presentar a Israel como un Estado paria y negar su derecho a la existencia”.