El Gobierno declinó referirse a la última declaración que entregó Mauricio Valero, el cual puso en duda que la actual jefa de Gabinete de la presidenta Michelle Bachelet, Ana Lya Uriarte, haya terminado el servicio por el que se le pagaron casi $20 millones.

Mientras que desde el entorno de Ana Lya Uriarte, aseguraron que ella está tranquila sobre el aspecto judicial, ya que tiene todos los documentos que acreditan que ejecutó el informe por el cual se le contrató.

El hecho quedó en evidencia, luego de que Valero prestara declaraciones este miércoles ante Fiscalía, delatando una posible irregularidad sobre la asesoría que realizó el año 2012 el buffet de abogados de Uriarte, dando un verdadero vuelco al caso.

En la instancia, el ex socio de Compagnon, aseguró que nunca vio el estudio medioambiental vinculado a la Central Termoeléctrica Los Guindos, el que se le encargó y por el cual se le pagaron $19.618.874 a Uriarte, como se había informado en mayo del 2015.

Según documentos a los que tuvo acceso Biobiochile.cl, el pago se efectúo a través de la emisión de dos facturas de la empresa Sustentabogadas Ltda, de propiedad de Uriarte, y que fueron ambas entregadas el 31 de julio del 2012. La primera asignada con el número 03 por un total de $615.874 y otra número 04 por $19.000.000.

En el documento se detalla que el primer servicio fue catalogado como “Consultoría energética con expertos“, mientras que el segundo fue por “Asesoría legal y de apoyo a gestión estratégica a Caval“.

Información que a través de la declaración de Mauricio Valero, respecto a que no vio resultados sobre el trabajo que se le encargó, abrió la puerta a un posible caso de “facturas ideológicamente falsas” entre la jefa de Gabinete de Bachelet y Caval.

La Moneda

El escenario que se presenta ahora es delicado para el Gobierno, que llevó a cursar reuniones del llamado “segundo piso de La Moneda”, instancia en la que se buscó hacer control de daño, especialmente por tema comunicacional, ya que Ana Lya Uriarte les señaló que no tiene nada que esconder frente al tema, según precisaron altas fuentes de Palacio.

Incluso, las mismas señalaron que la jefa de Gabinete ha mostrado a quienes trabajan cerca de ella, varios papeles entre estos el informe que realizó a Caval, el que incluye los capítulos que redactaron los subcontratados por Uriarte y que se enfocaron en temas técnicos que iban más allá de lo netamente jurídico o medioambiental.

Razones por la que Ana Lya Uriarte, militante del Partido Socialista y ex ministra de Medio Ambiente del primer Gobierno de Bachelet, les ha señalado al entorno de la mandataria que incluso como prueba fehaciente de la entrega de la información a Mauricio Valero y por ende a la empresa Caval, están los correos electrónicos, por lo que ha descartado en reiteradas oportunidades que las facturas por casi $20 millones, sean ideológicamente falsas o hayan ido a parar alguna campaña.

Fuentes de Radio Bío Bío explicaron incluso que ya el 2015, cuando reventó el caso Caval y se involucró a Ana Lya Uriarte, ésta papel en mano mostró una serie de correos electrónicos entre ella con Mauricio Valero y Natalia Compagnon, los que avalarían la versión de que sí se generó una relación laboral. Defensa que usó en su minuto para echar por tierra la versión de que esas platas fueran a financiamiento ilegal de política.