El ministro de Salud subrogante, Jaime Burrows, viajará este viernes a la región para analizar la situación de los menores, quienes también presentan contaminación por plomo.

Enfermedades cardiovasculares, infartos y cáncer podría causar la presencia de arsénico en nuestro organismo.

Es a lo que están expuestos 45 niños de entre 2 a 5 años de los jardines infantiles Semillita y Los Pollitos del Puerto de Antofagasta, quienes arrojaron distintos niveles de arsénico en su orina, según los resultados de los exámenes que realizó el Instituto de Salud Pública el mes pasado.

Los últimos 23 resultados fueron dados a conocer esta semana por la Intendencia de Antofagasta, luego de que el viernes pasado se presentaran 22 casos de niños contaminados con el metal pesado.

Aunque sólo uno de los menores analizados presentó niveles sobre la norma internacional para los adultos, de 35 microgramos de arsénico por litro de orina, la situación fue calificada como gravísima por el Intendente de la Región, Valentín Volta.

Fuentes del ministerio de Salud confirmaron que el ministro subrogante, Jaime Burrows viajará este viernes a la zona junto a otros ministros, se dice que liderados por el ministro de Interior, Rodrigo Peñailillo, para evaluar en terreno la situación de los niños contaminados.

Esto, ya que según los exámenes realizados el mes pasado a 107 niños de ambos jardines infantiles, todos presentaron algún niveles de contaminación por plomo.

De hecho, las muestras para medir contaminación por arsénico fueron tomadas a 79 menores, por lo que podrían aumentar el número de niños afectados. Para la alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, es necesario analizar a un espectro mayor de la población de la ciudad.

El municipio ya está realizando un examen a los adultos mayores que podrían haber resultado contaminados con arsénico a través del agua y cuya contaminación podría haber derivado en cáncer al pulmón y otro tipo de patologías. Mientras que tres mil millones de pesos invertirá este año el Ministerio de Salud en análisis a más de tres mil habitantes de la región, para conocer la magnitud y el origen de la contaminación por plomo y arsénico.