Al menos 80 perros callejeros murieron envenenados en la ciudad peruana de Cajamarca (noreste) durante la noche del viernes al sábado, en medio del estupor de la población que en vano trató de salvar a algunos de ellos, informó la prensa local.

La masacre habría sido realizada por trabajadores de la Municipalidad de Cajamarca, según denunciaron testigos citados por el noticiero del canal América televisión, aunque el municipio deslindó responsabilidades.

Los perros agonizaron unas horas antes de morir, luego de haber ingerido un veneno mezclado en bolsas de basura. Todos los cuerpos fueron recogidos por basureros de la ciudad.

Vecinos trataron de salvar a algunos de los canes dándoles agua con aceite de cocina para forzarlos a devolver el veneno, pero no tuvieron suerte en su intento.

Asociaciones de protección de los animales reclamaron a las autoridades locales investigar el caso.