El canciller brasileño, Celso Amorim, aseguró el sábado que el Mercosur y la Unión de Naciones Suramericanas, Unasur, pueden ser “más efectivos” que la OEA en el ejercicio de buenos oficios entre países sudamericanos, en declaraciones a la Agencia AFP, al margen de una conferencia en Ginebra.

“La OEA tiene su rol, porque hay muchos países que no son parte de Unasur y Mercosur, como los países de América Central, Estados Unidos, Norteamérica y también porque tiene una organización jurídica más acabada y en algunos casos puede ser necesario”, afirmó Amorim.

“Creo que para el ejercicio de buenos oficios entre los países sudamericanos, UNASUR o Mercosur, dependiendo del caso, pueden ser más efectivos”, declaró el canciller brasileño, que participa en una conferencia sobre seguridad internacional organizada en Ginebra por el International Institute for Strategic Studies, IISS, basado en Londres.

“UNASUR y Mercosur son totalmente complementarios”, afirmó Amorim.

Sobre UNASUR, la unión de 12 países de Sudamérica, el canciller subrayó que “ha probado que es muy eficaz, actuando discretamente algunas veces, como en las tensiones entre Colombia y Venezuela, en las que el ex presidente argentino Néstor Kirchner estuvo en parte de la reunión”.

“La propia canciller de Colombia ha agradecido al presidente Lula y a UNASUR”, por haber ayudado, recordó.

La ministra colombiana de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín, destacó el rol de líderes de Argentina y Brasil en el proceso de normalización de las relaciones de Bogotá con sus vecinos, en una entrevista publicada hace un mes.

Holguín declaró que el secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas, el ex presidente argentino Néstor Kirchner, desempeñó un “importante” papel en el restablecimiento de las relaciones entre Bogotá y Caracas, asunto que se “volvió un asunto regional”, según dijo.

La canciller también elogió el rol del mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien “tuvo una conversación con Chávez y Kirchner el día anterior a la posesión del presidente colombiano Juan Manuel Santos, el 7 de agosto, sobre la importancia de restablecer la relación”.