Para algunos padres hacer dormir a sus hijos es realmente un sacrificio. Esto debido a que no logran conciliar el sueño o suelen despertarse por las noches.
Ante esa situación, existe una serie de consejos para que la hora de llevarlos a la cama sea más amena y menos estresante.
En este contexto, Janine Reynolds enfermera en la Sheffield Sleep Clinic, donde se realizó un programa con el que lograron aumentar 2,4 horas de media el tiempo que durmieron los niños por la noche, entregó algunos consejos al diario electrónico Huffington Post.
A continuación te mostramos la rutina que Reynolds aplica y algunos factores que deberías evitar:
Rutina de 1 hora
Según explica la experta, es primordial establecer una rutina constante con los niños. Para eso puedes comenzar con una actividad de coordinación ojo-mano durante media hora. Por ejemplo, armar rompecabezas o clasificar formas.
Tras esas actividades llega la hora de la cena, y es importante que sea fuera de su dormitorio. “Prueba a darle alimentos que ayudan a conciliar el sueño, como cerezas, bayas o plátano por su alto contenido en melatonina”, precisa Reynolds. Asimismo, si tu hijo toma leche antes de dormir, que sea después de la comida y no acostado.
El siguiente paso es darle una ducha relajante “para conseguir el cambio de temperatura que necesita”. De esa forma debe ir directo a la cama. La especialista recomienda tener una frase preparada para cuando lo acuestes, como: “Buenas noches, que descanses, te quiero”.
“Deja las cosas claras. Prepara el ambiente para dormir y diles: ‘Un libro, un beso, un abrazo’. Luego diles que es hora de dormir y que lo quieres”, resume.
Considerando las fases del sueño de los niños, es mejor que dejes que se queden dormidos solos. Considera que los menores tienden a despertarse entre seis y ocho veces cada noche.
“Si no son capaces de dormirse solos , cada vez que se despierten, querrán las mismas comodidades: una mamadera, un cuento o tener a los padres al lado“, advierte la experta.
De este modo, Reynolds recomienda seguir la rutina conservando el mismo orden todas las noches. Además considera que debes despertarlos a la misma hora a la mañana siguiente para que el hábito sea constante.
Lo que deberías evitar
Por otra parte, la experta advierte que no debes alterarte ni generar tensión durante la rutina. Tiene que ser tranquila y constante. “Para dormir es necesario que el cerebro esté en calma y el niño tiene que aprender a ‘estar presente"”, explica Reynolds.
También debes evitar que en la habitación haya mucha iluminación. Algunos padres utilizan sus teléfonos o la televisión para ayudar a dormir a sus hijos. Sin embargo, Reynolds prefiere evitar las tecnologías.
“La habitación debería estar oscura o con una luz muy ligera para la hora del cuento”, complementa. No obstante, si necesitan una luz para dormir, elige una en tonos rojizos o anaranjados, ya que favorecen el sueño.
Tal vez piensas que hacer ejercicio antes de dormir, aunque sea correr por la casa, ayudará a cansar a los niños. Sin embargo, toma en cuanta que demasiada actividad física antes de ir a la cama no es lo ideal, ya que los niños seguirán revoloteando hasta el final del día.
“El ejercicio te activa”, advierte Reynolds, agregando que tampoco es recomendable que tomen bebidas azucaradas antes de irse a la cama.
Cabe señalar que si tus hijos se siguen despertando muchas veces por la noche y eso está afectando su salud mental o a la tuya, es necesario buscar ayuda profesional. “Es posible que los niños tengan déficit de hierro, síndrome de las piernas inquietas o algún trastorno del sueño sin diagnosticar”, concluye.
