El sábado 9 de marzo el médico Hassan Khan, vivió un momento inolvidable mientras viaja desde Jordania hasta el Reino Unido.

El pasado 9 de marzo Hassan Khan, vivió un momento impensable mientras viajaba desde Ammán, en Jordania, hasta el aeropuerto de Londres Luton, en el Reino Unido.

Khan es un doctor que volvía de sus vacaciones en Jordania, y que se dirigía al Hospital Basildon en Essex para continuar sus labores luego de 4 años de experiencia.

No obstante, en el transcurso del viaje la tripulación preguntó si dentro de los pasajeros había un médico, pues una mujer embarazada había roto su bolsa y comenzaba con su trabajo de parto, por lo que estaba a punto de dar a luz.

La futura madre de 38 años de edad, y de nacionalidad jordana, estaba ubicada en el suelo cerca del baño, rodeada del personal del avión, mismo lugar donde el doctor debió iniciar el procedimiento de emergencia.

Procedimiento de parto

Dada la diferencia de nacionalidad, el doctor y la mujer debieron comunicarse a través de un tercero que traducía las indicaciones médicas. Él hablaba inglés, mientras que la mujer la lengua de su país natal (Árabe).

Hassan Khan explicó para BBC, que la mujer “estaba bastante estresada por toda la situación, pero, a través del traductor logré asegurarle que tengo un poco de experiencia con recién nacidos”, dijo.

Pasado unos minutos el bebé logró nacer con algunas complicaciones. El doctor debió aplicar reanimación neonatal, pues según explicó para BBC, “el bebé nació un poco azul”.

Sumado a ello, el avión no contaba con elementos básicos para tratar el parto.

“Les dije a las azafatas qué equipo necesitaba – una máscara de oxígeno de tamaño neonatal, una pinza para el cordón umbilical y un estetoscopio-, ninguno de los cuales tenían en un avión, por supuesto”, explicó el profesional de la salud. Por lo que solo atendió a la madre y su hijo con tollas.

Resultados felices

Debido al nuevo nacimiento, el avión de Wizz Air tuvo que ser desviado hasta el aeropuerto de Brindisi, en el sur de Italia, para que la madre y el recién nacido fueran derivados inmediatamente a un hospital.

En cuanto a las impresiones del doctor al llegar a su trabajo, “la gente decía que era un milagro. Sólo me di cuenta de lo importante que era después de que tuve la oportunidad de procesarlo todo“, detalla para BBC.

Sumado a ello, el profesional menciona que la familia le informó desde el hospital que tanto la madre como el bebé se encontraban en buenas condiciones. “Fue un gran suspiro de alivio, una especie de cierre positivo de toda la situación”, añadió.