El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Juan Sutil, habla sobre migración, candidaturas presidenciales y el problema de la violencia en La Araucanía y la provincia de Arauco. “Una vez me dispararon en Curaco, así que sé lo que es recibir disparos", revela.

Le gusta que lo definan como “directo y cercano a la calle”, pero rechaza ser conocido por algunas polémicas declaraciones. Es Juan Sutil, presidente nacional de la poderosa Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), quien asegura que en varias ocasiones fue “tergiversado”.

“Soy una buena persona”, anuncia Sutil, quien confirma que va
a seguir con su “forma”. “Uno tiene que ser real y auténtico. Cuando uno dice la verdad, no veo por qué uno tiene que ser descalificado”, se lamenta.

En entrevista con BioBioChile, el líder del mundo empresarial dice que Jadue no contará con los votos de su gremio y habla de la violencia en La Araucanía y Arauco. Sobre este último conflicto asegura que el empresariado no tiene ninguna responsabilidad y apunta a una solución multidimensional que entregue seguridad y deje conforme a todos.

También conversa de la migración, luego de los eventos conocidos en Colchane: “Chile no puede darse el lujo de que cualquier persona, por necesidad que tenga, pueda entrar al país”, opina Sutil.

Estas son sus reflexiones.

Carrera presidencial

-En materia presidencial, ¿Qué candidatura le parece más atractiva para usted y el mundo empresarial?

En política dicen que una semana es mucho tiempo. Estamos en ese proceso, se están desarrollando candidaturas en todos los sectores. Creo que el proceso de elección a través de las primarias es un buen camino para elegir un buen candidato y luego los chilenos deberán elegir cuál es el mejor.

-Pero por ejemplo, Evelyn Matthei dijo que Sebastián Sichel es el candidato de los empresarios en Chile, ¿Qué piensa?

Yo dije que los empresarios eran muy amplios y muchos a lo largo y ancho del país y todos tienen diferentes preferencias. Dentro de eso, que yo conozca, no corresponde hacer una afirmación así, porque así como hay empresarios que pueden estar con la candidatura de Evelyn, hay otros que pueden estar por la candidatura de Heraldo Muñoz, por la candidatura de Sichel, Desbordes o cualquiera. Hay empresarios que tienen diferentes pensamientos políticos y lo expresan en el voto como corresponde. No pienso que haya sido un frase que refleje la realidad.

-Por otro lado ¿existe algún empresario grande que vaya por el lado de apoyar a Daniel Jadue?

Pienso que no, porque ahí hay una cosa muy distinta. Cuando se mira la socialdemocracia o centroizquierda, en todas partes del mundo, incluso, apoya o apoya la libre empresa. La libertad de emprender, el rol que cumplen la empresas y personas en base a la libertad y lo que a mi juicio representa el candidato Jadue no se condice con lo que acabo de decir. Es miembro del PC, que tiene una línea o pensamiento diferente. No tienen un pensamiento y un respeto por la libertad y por la libertad de emprender, en general. Ellos están más bien el pasado.

-En el caso de que Daniel Jadue pudiese llegar a La Moneda, considera que el mundo empresarial pensaría en salir del país…

Puede producirse una pérdida de confianza respecto de la actividad empresarial, del futuro de la libertad de emprender, de enseñar, de muchas cosas. Pero, no me pongo en ese caso, porque no debiera ocurrir y vuelvo a la misma frase en política: una semana es mucho tiempo.

Como sector empresarial, tenemos que cumplir nuestro rol en la sociedad en función de lo que la autoridad política va definiendo. No es tan fácil decir que los empresarios se van a ir. Nadie puede llevarse ni las fábricas, ni los muebles, computadores, campos, minas.

La inmensa mayoría quiere vivir en paz y que hayan cambios graduales. La gente no quiere confrontación, ni extremos, quiere convergencia. Tengo confianza, lo que va a ocurrir en las próximas elecciones es que la gente va a ir a marcar preferencias por los acuerdos, unidad, no en extremos.

-Hablando de extremos también, ¿Qué le parece la candidatura de José Antonio Kast?

No sé lo que es extrema derecha, porque cuando hablas de extrema, extrema izquierda, hablas de una más revolucionaria, que a veces se arma y la extrema derecha, al final, son planteamientos. Tampoco le haría bien al país, el mundo está en la convergencia y creo que no tiene chances. Pienso que el país hoy quiere convergencia, unidad, quiere cambios graduales.

En ese sentido, creo que lo que se va a manifestar, independiente de los candidatos que me han preguntado, es la mesura, la resiliencia, el buen juicio y criterio de los chilenos y no va a estar marcado en los extremos.

-Hay algunos que dicen que mientras más extranjeros ingresan a Chile es mejor para empresarios porque hay más oferta de mano de obra…

El efecto inmediato de una migración es que hay mayor disponibilidad de personas para trabajar y eso inmediatamente tranca el crecimiento de los sueldos y, a veces, el bienestar de las personas. Aquí hay un problema complejo, hay que equilibrarlo muy bien, donde, por un lado, está nuestra mirada humanitaria y, por otro, proteger al país.

Es lo mismo que pasa cuando un dueño de casa tiene que proteger a su familia. No debiera haber migración ilegal, porque puede venir cualquiera persona, con cualquier antecedente. Ha habido hechos lamentables como el caso del empresario Correa que lo mandaron a matar y que lo mató un sicario colombiano. Así, hoy día hay mucho delito, especialmente en el narcotráfico, asociado a extranjeros.

-Entonces…

Nosotros no tenemos que ser ciegos. Debemos tomar esto con la seriedad y racionalidad que corresponde. Hay que mirarlo con y sin corazón, en ambas facetas y racionalidad que corresponde, porque es un fenómeno complejo. Incluso más, si eres dueño de tu casa, eres libre de invitar, pero nadie puede entrar a tu casa, porque es tu entorno. La economía de los países es lo mismo que una casa, también se desequilibra. Los países que han alcanzado un desarrollo superior al nuestro, tienen migración, porque la desean, pero que se va enfocando a las necesidades que tienen y cuando son humanitarias, son específicas y focalizadas. Pero no una cosa permanente y masiva como estamos viviendo en Chile.

-Pero, para aclarar, al final, si hay sobreoferta de mano de obra por la migración, ¿le favorece o no al mundo empresarial?

No es tan absoluta la respuesta. Puede ser que en un caso puntual puede ser que le favorezca. Por ejemplo, hemos visto en los restoranes que muchas veces atienden personas migrantes y que lo hacen muy bien, pero desde el punto de vista formal, la sociedad en su conjunto requiere de equilibrios y formalidad. Lo que ha ido pasando es que ha crecido la informalidad, el comercio callejero ha crecido en desmedro del establecido.

Violencia en La Araucanía

-Pese a la pandemia, lo que no frenó es la violencia rural en La Araucanía, ¿es de extrema gravedad lo que se vive?

Sí, si se mira esa imagen que circuló de un grupo armado con metralleta en mano, se ve que esa situación pasa y la gente es como insensible y resulta que tenemos atentados a viviendas, sean mapuches y no mapuches, incendio a la propiedad pública y privada, tomas, extorsión, miedo y se expresa con una fotografía así, donde incluso la directiva de la CAM advierte que las comunidades no debieran vincularse al narcotráfico, esto se está desbordando y hay control territorial, como se ve en esa imagen, por parte de estos grupos paramilitares. Aquí estamos en un problema grande y serio.

Facebook

-Entonces…

Ir a un sector, ciudad o región donde no puedo pasar, donde se pierde el estado de derecho y se pierden los derechos como ciudadano o persona, que alguien levante una metralleta, o me dispare, lo encuentro gravísimo. Si eso además está vinculado a narcotráfico, extorsión o delito común, lo encuentro incluso tan grave o más grave que lo anterior.

Estamos en una situación muy compleja y que no se resuelve de una forma, se resuelve en conjunto, problemas de seguridad, de orden público, certeza jurídica, avance de la agenda de los pueblos originarios, de representación. Hay que hacer muchas cosas, pero que se ve desde lejos. Pregunto a la opinión pública, cuando ven esa fotografía ¿perciben realmente el riesgo? pareciera que no.

-Aquí se ha planteado a proyectos de ley, como el denominado “Juan Barrios” o el que aumenta las herramientas de las policías, como piedras de tope entre oficialismo y oposición para enfrentar el problema..

Este es un problema que hay que resolverlo en su conjunto y una de ellas es la seguridad. Por supuesto que ayudaría, no podemos tener un país sin Estado de Derecho en algunos lugares o control territorial de terceros que no sea el Estado de Chile, eso es inaceptable. Hay una agenda de seguridad que viene avanzando desde hace rato, que tiene un alto grado de no avance y hoy hay 17 leyes de seguridad, modernización de inteligencia de Carabineros, la ley Juan Barrios, del robo de la madera y suma y sigue.

Por otro lado, hay una agenda de avance de pueblos originarios que también está estancada. Finalmente, hay dos sectores políticos del país que no se ponen de acuerdo en cómo resolver esto de verdad. El sector político es responsable y está al debe.

Visitante frecuente

-Visita La Araucanía o la provincia de Arauco de manera frecuente…

Sí, estuve en septiembre con el presidente de la Sociedad de Agricultura, Ricardo Ariztía, y el presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, Antonio Errázuriz. Estuvimos allá una semana, incluso estuve más de eso. Recorrí la zona.

-Sintió temor de recorrer la zona…

No es menor, porque también uno pone el riesgo el pellejo. A mí una vez me dispararon en Curaco, así que sé lo que es recibir disparos para aterrizar en un helicóptero y tener que evacuar, porque recibía un ataque frontal.

-Entonces…

Eso se ve y resulta que en lo personal, en los proyectos en que nosotros hemos participado, de desarrollo productivo con comunidades mapuche, incluso con algunas que están muy cerca de Temucuicui, donde lamentablemente no puedo ir, no por mi integridad física personal, sino por las amenazas y represalias que son muy grandes.

“No tenemos responsabilidad”

-¿Qué responsabilidad le cabe al empresariado en el conflicto?

No tenemos responsabilidad desde el punto de vista del extremo que ha llegado a producirse en La Araucanía con situaciones como esa fotografía con armas, metralletas o AK-47, que se ha visto. Eso dice relación con situaciones más bien políticas. Aquí, han habido incumplimiento de promesas respecto de la agenda de los pueblos originarios, se ha manejado mal la política de tierras, hay una ley indígena que tiene cosas positivas, pero también negativas.

Finalmente, hay un problema de seguridad grave donde no hay un acuerdo en el sector político para avanzar. Entonces: ¿Qué responsabilidad puede tener un señor que tiene una propiedad hace 2 o 3 décadas, con títulos legítimos y lo único que hace es contribuir al país a través de sembrar trigo o avena o plantar un árbol y esa persona recibe la presión o extorsión?

Después hay forestales que respondieron a políticas públicas que les permitió desarrollarse y ahí pueden haber situaciones menores, como la calidad de los caminos, el polvo, hay gente que dice que la industria forestal no genera mano de obra, pero, responsabilidad directa del sector forestal, no la veo.

-En cuanto al robo de madera, se habla de un círculo vicioso donde se plantea que grandes empresas terminan comprando el producto sin trazabilidad…

En el Congreso se perdió y debe haber una legislación que permita atacar el flagelo del robo de la madera, así como fue con el abigeato, ese es el objetivo. El robo de madera se produce porque no existe control territorial, porque no hay estado de derecho en algunos lados. Hay gente que está con la metralleta en la mano que controla los caminos o más bien en Temucuicui, en que no puedes entrar porque lo impiden los propios comuneros.

Entonces, el robo de madera se provoca por la falta de control y la posibilidad de robar el producto. Esta madera termina más bien en comercialización ilegal y donde normalmente no llega a las grandes compañías, porque hacen trazabilidad de la misma. Ahora, puede pasar que algún inescrupuloso puede llevar alguna camionada de madera que nadie sabe su origen, pero en las grandes forestales hay trazabilidad.

-Entonces, ¿descarta que hayan empresarios profitando del robo de madera?

Lo que pasa es que palabra empresario se usa mucho y se denosta al sector empresarial. Que haya un gallo que tiene una bodega de madera en Cañete, que está vinculada al delito y que, para mí no es un empresario, es un simple comerciante o terrorista que está lavando dinero a través de esa madera, que la puede comprar Pedro, Juan y Diego, no es un empresario. Lo que conozco es que hay barracas o comerciantes que son tránsfugas o delincuentes que al final terminan diluyendo la madera en el consumo nacional.

Directo y cercano a la calle

-Usted dice que su discurso es “directo y de calle” ¿eso le ha jugado en contra o no? Como, por ejemplo, cuando señaló que pese a la pandemia no se debía aumentar las vacaciones…

Yo dije que no era el momento de discutir. Es muy distinto decir eso a que alguien lo cambie y especialmente medios anárquicos o ultras que cambian las cosas. Lo que dije es que no era el momento, que Chile necesitaba volverse a parar y que no era el momento de entrar a discutir por muy deseada que fueran las vacaciones, más vacaciones.

La gente valora mucho, de todos los sectores, incluyendo de sectores sindicales y sectores políticos diversos, el estilo con que he tomado esta responsabilidad. Que es muy distinto a lo que disparan muchos medios anárquicos o de ultraizquierda que tratan de distorsionar o generar una polémica al cambiar una frase.

-¿Por qué ocurre eso?

Es cosa que vean en Internet cómo me tratan. Me tratan de infeliz y delincuente y un montón de otros atributos que considero que no son correctos para mí. Soy una buena persona, he cumplido siempre con mi deber, han tratado de investigar hasta debajo de la alfombra, yo he sido correcto, he cumplido mis obligaciones laborales, tributarias, empresariales, humanitarias.

Por lo tanto, no tengo por qué hacerme cargo de lo que muchas veces replican medios que tratar de dividir. Me siento muy orgulloso de recibir felicitaciones de todos los sectores, especialmente de centro o de centro izquierda, que me felicitan cuando digo las cosas como son.

Y en suma…..

Voy a seguir con mi forma, si uno tiene que ser real y auténtico, cuando uno dice la verdad, no veo por qué uno tiene que ser descalificado. Recordarán el caso de las frambuesas que nosotros denunciamos a la empresa Frutti di Bosco y resulta que hay un montón de medios comunicación ultra izquierda o anárquico que dicen que es la empresa mía la que ha provocado una estafa, en consecuencia que nosotros denunciamos que una empresa, Frutti di Bosco, había hecho importaciones irregulares de frambuesas, que las procesaba en Chile y que las transformaba en un producto que era falso. Fueron sentenciados. Sin embargo, hay una prensa que se puede dar el lujo de mentir y nadie puede hacer nada al respecto.

-¿Y cómo se siente con eso?

Estamos en ese mundo y yo estoy tranquilo. Siempre hemos actuado correctamente y por el bien común por delante. Voy a seguir así. Puede ser que algunos no les guste. Por ejemplo, voy al programa de La Red, donde está la Alejandra Matus y José Antonio Neme, que es bastante ultra izquierda. Voy con mi mejor cara y mejor forma, con buena data y se pone en duda. Digo ¿por qué? si la data que da la Superintendencia de Pensiones, que lo dan las mutuales, que es una data correcta. Eso le hace mal al país, cuando hay tal parcialidad o una forma de hacer periodismo que no cumple el equilibrio, según Sutil.