Un caso criminal -que era investigado de manera desformalizada desde hace un año por la PDI y la fiscalía- quedó al descubierto este martes cuando la justicia decretó la medida cautelar de prisión preventiva en contra de un imputado como autor de un grave delito de violación, cuya víctima fue su hermana menor.

Según constató Diario El Centro, los ataques sexuales se remontan a enero y julio del año pasado, todos ocurridos en el domicilio familiar ubicado en el barrio norte de Talca. El fiscal Pedro Salgado, con especialidad para investigar delitos de connotación sexual, explicó que el 10 de julio la víctima fue derivada de urgencia al Hospital Regional de Talca.

Esto último, debido a que presentaba un sangramiento vaginal que, tras el examen de los especialistas, fue diagnosticado como un aborto incompleto. El médico ginecólogo que atendió a la joven realizó la denuncia por abuso sexual. El fiscal añadió que, de inmediato, se instruyeron diligencias investigativas a la PDI de Talca.

Examen de ADN

Los detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales interrogaron a todo el grupo familiar, esto es, a los padres y dos hermanos mayores de la víctima. A la vez, se reunió información respecto de la situación de la joven, estableciendo que sufre una enfermedad mental y que, también, se encuentra postrada.

El fiscal explicó al juez Américo Castro que la víctima tiene una personalidad y edad mental correspondiente a una bebé de apenas nueve meses. También dijo que, en enero del presente año, se ordenó la toma de muestras de sangre a la familia de la joven, para cotejar el ADN de todos ellos con la evidencia biológica del aborto.

Dicho examen fue encargado a la sección de genética forense del Servicio Médico Legal (SML) de Santiago, cuyo resultado llegó recién la semana pasada a la fiscalía de Talca. El persecutor sostuvo que el peritaje estableció que la paternidad del embarazo de la víctima corresponde en un 99,99% al imputado.

Dos agravantes

Con todos estos antecedentes y, atendida la circunstancia agravante de ser el imputado un familiar de la joven, además de la condición de indefensión en que ella se encuentra, el fiscal exigió la medida cautelar de prisión preventiva, por estimar que su libertad constituye un peligro para la seguridad de la sociedad y de la víctima.

En contraparte, la abogada Paz Díaz, de la Defensoría Penal Pública, replicó que el imputado no se ha evadido de la acción de la justicia y, también, que la joven siempre ha estado bajo el estricto cuidado de su madre. Agregó que el imputado no registra condenas anteriores, por lo cual, se opuso a la petición de la fiscalía.

Pero el juez se inclinó por la solicitud del persecutor y ordenó el ingreso del detenido a la cárcel de Talca. A la vez, junto con limitar en dos meses el plazo de la investigación, también instruyó a Gendarmería que informe -a petición de la defensa- si el imputado puede cumplir la medida cautelar en una unidad penal distinta.