Una trágica situación quedó en evidencia este martes, tras el hallazgo sin vida de un padre y su hijo, quien estaba en condición de postrado, en una vivienda de Chiguayante. Ante lo ocurrido, desde el municipio afirmaron que el joven era paciente del Cesfam y era visitado semanalmente por el personal de salud, pero desde el 25 de enero no abrían la puerta para recibir atención.

La Municipalidad de Chiguayante lamentó el hallazgo de los cuerpos sin vida de un padre y su hijo, quien estaba postrado, en una vivienda de la comuna, en la región del Bío Bío. La data de muerte es aproximadamente de 20 días.

Todo quedó en evidencia la mañana de este martes, cuando personal de salud llegó a la vivienda en el sector Manantiales y al no ser recibidos contactaron a Carabineros por una presunta desgracia.

De esa forma, al interior del inmueble se encontraron los cuerpos de Alejandro Ortega, de 59 años; y su hijo, Francisco Ortega de 26, quien en su condición de paciente postrado requería de asistencia.

Preliminarmente se presume que el padre sufrió un infarto y que el joven murió por motivos de inanición y abandono.

Tras el trágico caso, desde la casa edilicia emitieron un comunicado donde lamentaron los hechos e indicaron que el joven era “usuario del Centro de Salud Familiar Chiguay”.

“No abrían la puerta”

De igual forma, aseguraron que “esta familia recibía visitas semanales del equipo de salud, compuesto por una nutricionista, químico farmacéutico, enfermero y asistente social, pero desde el 25 de enero que no abrían la puerta”.

En ese contexto, hoy, cuando el personal concurrió nuevamente al domicilio, “detectaron gran cantidad de insectos y, por ello llamaron a Carabineros para informar una presunta desgracia”.

Muerte de padre e hijo en Chiguayante
Cedida a RBB

El alcalde Antonio Rivas aseguró que “el municipio permanentemente ha cuidado y generado programas de protección a quienes tienen movilidad reducida, porque muchas veces somos las únicas personas que acudimos a acompañarlos y apoyarlos”, agregando que también han sido garante de situaciones de vulneración de derechos.

Para finalizar indicó que “lamentamos lo ocurrido y nos sumamos al dolor de la familia y amigos”.

En la comuna hay 250 personas postradas, las que son atendidas por profesionales de los tres Cesfam, donde se les entrega medicamentos, alimentos y atención profesional en visitas periódicas en sus domicilios.