Pese a que debía declarar como imputado, el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto, no se presentó ante el fiscal Sergio Moya, quien investiga las eventuales irregularidades en lo que respecta a la gestión económica del Teatro Regional de Rancagua y la Corporación de la Cultura y las Artes, instancia de la cual es presidente.

Soto debía presentarse a las 9:30 horas, sin embargo, según consignó el medio El Tipógrafo, no llegó a la cita y tampoco se entregaron explicaciones respecto a la ausencia de la autoridad comunal.

De esta forma, se configuran dos escenarios: el primero es la programación de una nueva cita en una fecha a definir.

El segundo en tanto, sería que el alcalde Eduardo Soto no fuera citado para prestar declaración en el marco de la investigación de los delitos que se le imputan.