Los Laicos Organizados de Osorno solicitaron a la comisión papal que llegará la ciudad el próximo jueves, que de concretarse la solicitud pública de perdón a la ciudad, sea el propio papa Francisco quien la realice a través de una sistema de videoconferencia.

Esto tras reunirse como organización y analizar la coyuntura que comienza el próximo martes, cuando los obispos Charles Scicluna y el sacerdote Jordi Bertomeu, lleguen a Chile para analizar la situación de la diócesis local y de Juan Barros.

De hecho, el prelado no estuvo presente en la misa dominical de esta jornada, la que podría haberse convertido en la última que habría oficiado, si es que se confirma que el papa Francisco aceptó su renuncia.

Para Mario Vargas, vocero de los Laicos Organizados, el propio Barros ya sabría que su futuro no es seguir en la ciudad.

Sin embargo, para los laicos, la visita de Bertomeu y Scicluna abren un nuevo proceso, que es el restablecimiento de la Iglesia Católica local, junto a nuevo obispo.

Pero agrega que para ello debe haber primero signos, como el del perdón, que debiera ser pronunciado por el propio papa Francisco.

Aseguraron que las condiciones técnicas están para poder concretar el contacto con el obispo de Roma, por lo que sólo es cuestión de voluntad de el Vaticano.