Era el hombre de confianza de la presidenta Michelle Bachelet, por lo que su salida como administrador de La Moneda ha sido uno de los golpes más importantes que ha recibido la mandataria desde su retorno al palacio presidencial.

Corría febrero y todas las pautas de la prensa se dedicaban a temas veraniegos, pero de súbito la atención se volvió a la sede del Ejecutivo luego que un reportaje de Ciper Chile revelara pagos del Estado por más de $417 millones de pesos a dos empresas vinculadas a Cristián Riquelme.

Rápidamente, la presión comenzó a aumentar en contra del excompañero de curso de Rodrigo Peñailillo, que sumaba su segundo escándalo tras los cuestionamientos por recibir en La Moneda a Juan Díaz, gestor inmobiliario y exoperador de la UDI, quien le pidió intervenir con la nuera de la presidenta Bachelet por una deuda impaga con la polémica empresa Caval.

Ante las presiones, y pese a la cerrada defensa que realizó la propia Bachelet, finalmente Riquelme dejó su cargo tras 6 años administrando el palacio presidencial, en lo que fue “leído” como la caída del último bastión del G-90 en el Gobierno.

Si bien su salida cerró un flanco de críticas a Bachelet, lo cierto que esto sólo dio pie a que el fiscal de Alta Complejidad Centro Norte Jaime Retamal, iniciara una investigación desformalizada y que hasta ahora se había mantenido en estricta reserva, sin que hasta ahora haya sido citado a declarar, según informó El Mercurio.

Se trata de una indagatoria por eventual fraude al fisco y/o negociación incompatible, por la adjudicación de millonarios contratos con el Estado de dos empresas, Comercial A y R -Socoar- y Greentec, que tienen como domicilio particular el departamento de Riquelme donde actualmente reside.

Ambas sociedades se adjudicaron entre 2013 y 2015 contratos con el Estado, que en total acumulan pagos por $417 millones en 39 órdenes de compra por insumos médicos a hospitales públicos, como sillas de ruedas, catres clínicos y camillas, algunas incluso mediante trato directo.

No obstante, esta no es la única arista judicial que salpica al ahora exadministrador de La Moneda, puesto que el reconocido operador político y recaudador de la campaña de Michelle Bachelet, Giorgio Martelli, también lo sacó al ruedo al mencionarlo en la declaración que dio ante el Ministerio Público por el Caso SQM.

En la oportunidad, Martelli aseguró ante la fiscalía que le prestó dinero a la empresa que le administraba los fondos de campaña de Bachelet, Somae, y que fue administrada precisamente por Riquelme.

Destacar que en el caso que el Ministerio Público consiga antecedentes suficientes, deberá oficiar al Consejo de Defensa del Estado para que se haga parte como querellante, dado el rol de funcionario público que tenía Cristián Riquelme.