VER RESUMEN

Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

La candidata presidencial de Chile Vamos, Evelyn Matthei, causó controversia en abril pasado al justificar las muertes durante la dictadura militar de Pinochet, argumentando que al inicio era "inevitable que hubiera muertos" debido a la guerra civil. Tras recibir críticas, Matthei envió una carta de disculpa a Sebastián Edwards, reconociendo que sus palabras causaron dolor y reafirmando su rechazo a las violaciones a los derechos humanos.

En abril pasado, la candidata presidencial de Chile Vamos, Evelyn Matthei, defendió el paso de su padre, el fallecido comandante en jefe de la FACh, Fernando Matthei, por la Junta Militar, asegurando que al inicio de la dictadura era “inevitable que hubiera muertos”.

En entrevista con Radio Agricultura, enfatizó en que ella apoyó el golpe de Estado, pero no la dictadura. “Al principio, en el 73, 74, era bien inevitable que hubiera muertos porque estábamos en una guerra civil. Pero ya en el 78 y el 82 y siguen ocurriendo… ahí ya no. Porque ya había un control del territorio, entonces ahí hubo gente que hizo mucho daño, loquitos que se hicieron cargo y que nadie los frenó a tiempo”, sentenció en esa oportunidad.

Tras sus dichos, Matthei envió una carta a El Mercurio, dirigida a Sebastián Edwards, donde se disculpó y aseguró que no justifica ni defiende las muertes que se provocaron.

En específico, la candidata se refirió a una entrevista que dio el economista en Tele13 Radio, quien al ser consultado por la opción entre anular o votar por Matthei, Edwards señaló que esperaba una aclaración sobre sus dichos.

“Leí con mucho interés tu entrevista la semana pasada y, junto con felicitarte por lo oportuno de tus comentarios sobre lo que nos enseña la historia respecto del tipo de programas que ofrece la candidata del gobierno, quiero recoger el guante de lo que a ti y a mucha gente le importa: mis dichos en una radio sobre las muertes luego del 11 de septiembre de 1973“, partió expresando la abanderada.

En ese sentido, afirmó: “Sé que a muchos chilenos les molestó u ofendió lo que dije, y desde ya me disculpo por el dolor que mis palabras pudieron causarles. Nada más lejano de mi intención. Lo que dije iba en un sentido completamente diferente”.

“La extrema polarización ideológica y la violencia verbal y física se habían tomado nuestra sociedad durante los años sesenta y principios de los setenta. Nuestro país era un escenario donde se jugaba la Guerra Fría. Se trataba a los adversarios como “enemigos”, y en ello todos los sectores tuvieron responsabilidad. La política no defendió la democracia, y cuando vino el golpe militar, lamentablemente hubo persecuciones y muertes. No las justifico, no las defiendo. ¿Cómo podría hacerlo o creerlo? Menos aún puedo aceptar o justificar asesinatos ni torturas de prisioneros. Nada puede justificar semejantes actos“, continuó.

Asimismo, señaló que, a su juicio, es una lección “que creo que la mayoría hemos aprendido”.

La vida, la libertad, la democracia, los derechos humanos son intransables, y hay que defenderlos siempre, sin medias tintas, aquí y en todas partes, ahora y siempre”, zanjó.

En esa línea, dice ver “con preocupación” signos de esa polarización en los extremos de la política chilena.

Por eso aprecio tus palabras, Sebastián. Porque creo que nos unen muchas más cosas. Porque estoy segura de que una gran mayoría de compatriotas quiere trabajar juntos para hacernos cargo del combate contra el crimen organizado, de la superación de la pobreza, de la reducción de las listas de espera en salud, de la crisis de vivienda y del aprendizaje de nuestros niños”, subrayó.

“Esta es una tarea grande y común. Es a ella que quiero invitar a cada uno de nuestros compatriotas y en especial a ti, para que, si confías en mí y en mi equipo, me acompañes en la epopeya de construir un Chile mejor y más justo para todos”, cerró.