Por siete votos a favor y cinco en contra fue aprobada —en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputadas y Diputados— la indicación que presentaron diputados de oposición, que mezcló la creación de un impuesto para los llamados ‘super ricos’ y el aumento del impuesto a las grandes empresas. El Gobierno, por su parte, insistió en la reserva de constitucionalidad y los parlamentarios de oficialismo presentarán su propuesta la próxima semana.
El avance de la indicación significa que se podría crear un impuesto para las cerca de 1.400 personas que en Chile tienen una fortuna mayor a US$22 millones, y el aumento del impuesto de primera categoría a las grandes empresas del 27% al 30%. Esto aplica para las empresas que tuvieron ingresos superiores a los US$41 millones.
Sin embargo, lo anterior no necesariamente se traduce en que la iniciativa pase a Sala. Los diputados Gonzalo Fuenzalida (RN), Alejandro Santana (RN) y Luciano Cruz-Coke (Evópoli) cuentan con una contrapropuesta que será discutida la próxima semana. Esto también significa que la idea de la oposición de que la iniciativa pasara a la Sala este jueves, fuera desechada.
Pese a esto, la diputada Camila Vallejo (PC) valoró que se aprobara por mayoría la propuesta y dijo que todas estas medidas son para que el Estado recaude más dinero para paliar la crisis que ha traído la pandemia.
En todo caso, la diputada no escondió que a su parecer, los diputados de Chile Vamos alargaron la discusión solo para que no se alcanzara a votar su propuesta esta semana.
“Claramente un sector de la derecha llegó con una propuesta de indicación sin el ánimo de discutirla el día de hoy. Lo que yo interpreto es que fue con el ánimo de que no se terminara de votar hoy. Lo lograron. Hay que revisar el detalle, es bueno que hayan presentado por fin una propuesta porque el Ejecutivo hasta el momento es el único que no ha presentado ninguna propuesta”, sostuvo.
Además, pese a que el subsecretario Máximo Pavés ya había hecho reserva de constitucionalidad, el ministro Juan José Ossa hizo un punto de reiterar esa reserva una vez aprobada la indicación, y recordó que el mismo diputado Walker, que hoy apoya la propuesta, había planteado el año pasado que ese proyecto debió ser iniciativa presidencial.
El propio Walker dijo que esta aprobación se traduce en una alineación por parte de la oposición y se refirió a la recaudación del impuesto a la gran empresa.
“No siempre en la oposición somos capaces de ponernos de acuerdo. Fuimos capaces de ponernos de acuerdo que las grandes fortunas del país puedan hacer un esfuerzo para poder financiar una renta básica universal de emergencia. La indicación nuestra equivale a recaudar más de 1.700 millones de dólares al año”, aseguró.
Respecto a lo anterior realizó una crítica el diputado Gonzalo Fuenzalida, quien junto a sus pares de oficialismo realizaron consultas y comentarios a la indicación, sobre cuáles son las fuentes que usaron los diputados para reportar las cifras de recaudación; sobre el mecanismo para poner una indicación al patrimonio neto; y si ayuda en algo al Servicio de Impuestos Internos conocer cuanta fortuna tiene una persona de las más acaudaladas de Chile.
Dijo que la idea de Vallejo no recauda, no funciona. Agregó que su propuesta no es humo, y buscará ir por el FUT, o sea, el Fondo de Unidades Tributarias de los super ricos.
“Una alternativa que sí recauda, que no es humo. Aquellos que más tienen, que tienen hoy utilidades que están guardadas (…) y que todos los años aprovechan, tengan una tasa preferencial para aprovecharla que puede llegar a cerca de 20 mil millones de dólares y también la posibilidad de nuevamente repatriar a una tasa de un 8% que en el año 2015 logró recaudar 1.500 millones de dólares. Estamos proponiendo algo que no afecta a la economía”, adujo.
Desde la oposición tienen desconfianza sobre la propuesta del oficialismo, señalando que deberá ser estudiada ante una eventual letra chica.
Desde Chile Vamos, sin embargo, tienen confianza en que su idea recauda más y esperan que juegue a su favor el hecho de que ésta contiene la propuesta de la repatriación de capitales, la que el año 2015 fue impulsada por la expresidenta Michelle Bachellet.
Recordamos que la idea fue parte de la Reforma Tributaria del segundo gobierno de la expresidenta, bajo la cual los contribuyentes pudieron declarar sus capitales y patrimonios en el extranjero pagando un impuesto único.