El administrador apostólico de Santiago, Celestino Aós, rechazó el proyecto de ley que obliga a religiosos y sacerdotes a denunciar a la justicia los casos de abusos sexuales a menores de edad, incluyendo los relatos entregados bajo el secreto de confesión.

Aós cuestionó que los parlamentarios rechazaran la indicación que excluía denunciar los testimonios conocidos a través de la confesión y calificó esta acción como “el peor de los abusos”.

“Estamos simplemente ante lo más sagrado del ser humano, que es la conciencia. Y cuando un poder quiere vulnerar la conciencia de una persona estamos ante el peor de los abusos que pueda cometerse. Cada fiel, si usted va a confesarse, tiene el derecho a que lo que se dice en confesión es absolutamente secreto”, expresó Aós.

Que (la Iglesia) se empiece a actualizar también: poder tener una actitud mucho más proactiva en orden a poder terminar con la sensación de impunidad y encubrimiento
- Raúl Soto, diputado de la DC

El denunciante de abusos sexuales en la Diócesis de Valparaíso y exseminarista, Sebastián del Río, consideró que será difícil cambiar la postura de la Iglesia Católica en esta materia.

“Esa es la postura de la Iglesia, amparada en la visión pastoral y también en la justicia canónica. El secreto de confesión es inviolable para la Iglesia Católica”, afirmó del Río.

Uno de los impulsores de la iniciativa, el diputado de la Democracia Cristiana (DC) Raúl Soto, aseguró que es necesaria una autocrítica y mayor compromiso de las autoridades eclesiásticas.

“Que (la Iglesia) se empiece a actualizar también: poder tener una actitud mucho más proactiva en orden a poder terminar con la sensación de impunidad y encubrimiento”, resaltó Soto.

Desde el oficialismo, el diputado de Renovación Nacional (RN) Leopoldo Pérez aseguró comprender las declaraciones de Celestino Aós. Sin embargo, dijo que son materias que deben discutirse en las próximas etapas legislativas.

“Tiene toda la razón desde el punto de vista de la teología y como administrador apostólico. Si un sacerdote estuviera obligado por la ley podría ser perfectamente sancionado por el Código Penal, o sea podría perder su calidad de sacerdote”, manifestó Pérez.

El proyecto será discutido en la comisión de Constitución del Senado. La exclusión del secreto de confesión también será el principal tema a tratar durante la Asamblea Plenaria de Obispos número 118, que se realizará esta semana en Punta de Tralca.