En el marco del Día Mundial del Clima, y en un año marcado por la Cumbre de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático que se realizará en diciembre de este año en Santiago, Chile aún tiene desafíos pendientes en materia de políticas de protección contra el cambio climático.
Además de mitigar efectos del aumento de las temperaturas, como el derretimiento de glaciares y la disminución de precipitaciones en la zona centro-sur, los expertos advierten que el país requiere medidas que consoliden su liderazgo político en materia ambiental.
En ese sentido, los objetivos centrales son reducir la emisión de gases de efecto invernadero, y la producción de energía en base a combustibles fósiles.
El director nacional de Greenpeace, Matías Asún, asegura que Chile debe plantear un compromiso claro en torno a la explotación de carbón para la matriz energética si el objetivo es liderar la COP25.
Por su parte, la abogada y coordinadora de Cambio Climático de la ONG Fima, Patricia Araya, sostiene que la política ambiental del país debe ser consistente, presentando una Ley sobre Cambio Climático, y suscribiendo definitivamente el Acuerdo de Escazú.
El investigador del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia de la Universidad de Chile, Roberto Rondanelli, detalló los principales focos de afectación donde debe enfocarse la mitigación respecto de los efectos del cambio climático.
Mientras el Gobierno aún no presenta el proyecto de Ley Marco de Cambio Climático que anunció para este año, y que establecería un objetivo de emisiones concreto, la Comisión de Medio Ambiente del Senado presentó hace menos de dos semanas un nuevo proyecto de ley sobre protección de los glaciares, que los cataloga como bienes nacionales de uso público.
Esta sería la sexta iniciativa relativa al resguardo de las masas de agua dulce congelada, desde 2005.