Según cifras de la Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones (Uciex) de la Fiscalía Nacional, desde 2013 a la fecha, la justicia chilena ha pedido extraditar a 134 personas, principalmente por delitos de robo y tráfico.

Alberto Chang y Rafael Garay han sido particularmente mediáticos por dos razones: los delitos cometidos y los países que otorgaron asilo, consigna Emol.

No ha pasado una semana del rechazo de Malta a la solicitud de extradición de Alberto Chang, acusado por delitos de estafa, lavado de activos e infracción a la Ley de Bancos. Afectó a unas mil personas por más de 100 millones de dólares.

Por otra parte, Rafael Garay fue sentenciado a 7 años de presidio, tras cometer el delito de estafa reiterada en contra de 29 víctimas, por $1.300 millones. Garay estuvo en Rumania, pero la Fiscalía Centro Norte dictó una orden de captura internacional y se logró extraditar en marzo de 2017.

Otro caso que también ha marcado la pauta estas últimas semanas es Ricardo Palma Salamanca, exmiembro del FPMR, acusado por el homicidio del exsenador Jaime Guzmán, en 1991, y el secuestro de Christian Edwards. Hoy se mantiene con asilo político en Francia.

Todos ellos son parte de los 134 pedidos de la justicia de los últimos cinco años, que en promedio son unas 23 solicitudes de extradición al año.

Así como Palma Salamanca o Chang, existen más de 50 solicitudes que no han sido concedidas por los países donde se encuentran estas personas acusadas en Chile. No obstante, un 54% del total fue aprobado y las personas extraditadas.

En detalle, 52 solicitudes se encuentran pendientes, 7 concluyeron con el buscado detenido en Chile y 4 fueron rechazadas.

Desde 2014 a la fecha, la Fiscalía recibió 82 solicitudes. Un 53 fueron concedidas; 20 rechazadas y 9 terminaron por diversas causas.

Dentro de los procesos exitosos para la justicia está Flavio Rocha, ciudadano brasileño encontrado en Buenos Aires, que se llevó a sus dos hijos desde Valdivia; y Enzo Cancino, acusado de disparar en el vientre a su pareja embarazada y que 3 años después fue detenido en Italia.

Quien también fue extraditado fue Francisco Huaiquipán Bustos, hijo del ex futbolista, quien estuvo en España luego de un homicidio fuera de una discoteca. Y en el caso del “robo del siglo”, Kevin Olguín, por la sustracción de $6 mil millones desde el aeropuerto de Santiago en 2014.

¿Cómo opera?

Según la Uciex, el pedido de extradición no sólo ocurre cuando se debe cumplir una condena, sino también cuando un imputado debe enfrentar un proceso penal.

Para ello, el fiscal del caso pide el traslado al Juzgado de Garantía, que luego será analizado por la Corte de Apelaciones. Una vez acogida, pasa a ser materia diplomática, a través del canciller y las embajadas correspondientes. Esto, con el actual sistema.

No obstante, con el antiguo sistema procesal, todo se ve ante la Corte Suprema.

En el caso de los imputados, “son herramientas de cooperación internacional donde el objeto es impedir la impunidad y cuando esto se entiende así, también uno se da cuenta que esto no determina culpabilidad o inocencia, sino que la persona se haga cargo del proceso en su contra“, aclara Antonio Segovia, director de la Uciex.

Segovia agregó que Sudamérica y España son los lugares más frecuentes, “como Perú, Bolivia, Argentina y Paraguay. En Europa es en especial con España”. Por otro lado, los casos de Malta, Rumania y Holanda son excepciones.

Exigencias internacionales

Entre los obstáculos que se presentan, el fiscal regional Oriente, Manuel Guerra, indicó a Emol que se deben a las distintas exigencias de los estados. “Son culturas jurídicas que tienen reglas muy distintas y no siempre es fácil asumir exigencias ajenas” y que hasta el idioma puede ser una dificultad.

En el caso de Chang, por ejemplo, los documentos entregados no cumplían con los requisitos formales en cuanto a legalización, exigidos por la corte de Malta. “Sería conveniente que el Estado se suscriba al tratado europeo de extradición, porque nos permitiría realizar los pedidos de manera más sencilla”, concluyó Guerra.