Los ministros de Defensa de la Unión Europea (UE) respaldaron este martes iniciar los trabajos para definir los parámetros de una posible misión destinada a entrenar al Ejército ucraniano, de modo que aprenda a utilizar las armas que los países europeos le entregan en la guerra contra Rusia.

Los ministros de Defensa de la Unión Europea acordaron comenzar a estudiar los parámetros y las condiciones en las que se llevará a cabo en un futuro la misión de entrenamiento europeo para las fuerzas ucranianas, según anunció el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell.

Los Veintisiete se mostraron de acuerdo en iniciar el “trabajo preparatorio” para la puesta en marcha de la misión, para la que ahora habrá que definir los detalles, explicó Borrell en rueda de prensa al término de la reunión informal de ministros de Defensa, recordando que precisamente por su carácter informal no se podían tomar decisiones en firme.

“Está claro que tenemos que ser rápidos y ambiciosos”, subrayó el alto representante en cuanto a los tiempos para que haya un acuerdo a Veintisiete que permita poner en marcha esta nueva misión de asistencia militar, incidiendo en que el proceso para definir “los parámetros legales y operativos” se llevará a cabo en coordinación con Ucrania.

Precisamente, su ministro de Defensa, Oleksii Reznizov, tuvo ocasión de explicar por videoconferencia a los ministros las necesidades de entrenamiento militar que requieren tanto a corto, como a medio y largo plazo.

Aunque reconoció que algunas de las iniciativas de entrenamiento militar en curso por parte de estados miembro “se están haciendo bien”, Borrell sostuvo que la futura misión europea permitiría dar una mayor “coherencia” y también una garantía en el tiempo respecto a dicha formación.

En este sentido, el alto representante defendió que el hecho de que la UE aunara esfuerzos podría ser especialmente útil para “entrenamiento de alto nivel, organizar la logística, organizar la sanidad militar, o brindar protección contra armamento nuclear o químico”.

España respalda la iniciativa

Por su parte, la ministra de Defensa española, Margarita Robles, sostuvo que en caso de que finalmente esta misión de entrenamiento vea la luz tendrá “un alto valor político”.

En su opinión, la UE cuenta con una gran experiencia y liderazgo en ese tipo de misiones, por lo que esta posible misión puede lograr un gran valor añadido para proteger mejor a la población ucraniana.

Ello “requiere asegurar una estrategia de comunicación clara, un planeamiento minucioso y prudente, y seguir criterios de eficacia”, sostuvo, según informó su Ministerio.

En ese sentido, la ministra ofreció contribuir con módulos específicos de adiestramiento en España, donde se dispone de instalaciones y simuladores, incluyendo el transporte del personal militar ucraniano.

También otros países han ofrecido su territorio.

La ministra de Defensa belga, Ludivine Dedonder, dijo que su país podría brindar su experiencia en desminado, en solitario o con otros países mientras que la ministra de Países Bajos, Kajsa Ollongren, indicó que su país junto a Alemania ya presentaron una oferta de entrenamiento en desminado a la que podrían sumarse otros países.

La idea, según explicó, es que dicho entrenamiento se lleve a cabo en suelo alemán y la intención de ambos países es ponerla en marcha antes de que se lance la eventual misión de la UE, a la que posteriormente podría incorporarse. También el ministro eslovaco, Jaroslav Nad,, planteó la posibilidad de acoger a la misión europea.

Por otra parte, en sus declaraciones a la llegada al encuentro esta mañana, Borrell reconoció que la misión de entrenamiento europea enfadará a Rusia.

“Muy probablemente Rusia no estará contenta, ya no lo está con el hecho de que estemos brindando grandes capacidades militares”, recordó, prometiendo que la asistencia militar se mantendrá tanto tiempo como sea necesario.