Después de una década de conversaciones, Berna estima que las diferencias con su principal socio comercial son todavía “demasiado grandes” como para llegar a un pacto.

El gobierno de Suiza anunció la ruptura de las negociaciones para un acuerdo marco entre ese país y la Unión Europea.

Con el acuerdo se quería actualizar la cooperación bilateral, la participación de Suiza en el mercado único y establecer el mecanismo de resolución de diferencias.

“El Consejo Federal decidió poner fin a las negociaciones”
tras someter el acuerdo de los cantones suizos y otras partes interesadas, señaló el presidente Guy Parmelin.

A juicio de las autoridades, las diferencias entre las partes son demasiado grandes.

Ante la creciente oposición interna al acuerdo, que es visto como un peligro para la soberanía del país, el Ejecutivo decidió cerrar la puerta.

“Estamos abriendo un nuevo capítulo en nuestras relaciones, ojalá uno fructífero”, dijo Parmelin. “Tomamos la decisión de no firmar el acuerdo y comunicamos esto a la Unión Europea. Esto pone fin a las negociaciones sobre el borrador del tratado”, agregó el mandatario.

UE lamenta la decisión

Las principales divergencias entre Berna y Bruselas giran en torno a las ayudas estatales o la directiva sobre los derechos de los ciudadanos de la UE.

Por otro lado, la aprobación de un acuerdo marco podría significar de facto que Suiza adoptara de manera automática legislaciones comunitarias. Según los contrarios a las negociaciones, afectarían al sistema nacional de democracia directa.

Pese al fracaso en las negociaciones, el país mantendrá los acuerdos bilaterales anteriores. Asó lo aclaró el ministro de Asuntos Exteriores, Ignazio Cassis, quien afirmó que Suiza y la UE “siguen estrechamente vinculadas”.

Por ahora, los lazos entre ambas partes son regulados por cinco acuerdos, que se pretendía unificar.

Por su parte, la Unión Europa lamentó la decisión adoptada por Berna.

“Sin este acuerdo, la modernización de nuestras relaciones no será posible y nuestros acuerdos bilaterales envejecerán inevitablemente”, agregó Bruselas.