El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, defendió las acciones de Kyle Rittenhouse, el tirador que la semana pasada mató a dos manifestantes e hirió a otro durante las protestas en Kenosha (Wisconsin).

Durante una rueda de prensa en la Casa Blanca, Trump justificó a los grupos de derecha que el sábado participaron en choques en Portland (Oregón) y se negó a condenar a Rittenhouse, quien el pasado 25 de agosto se presentó en Kenosha armado y que mató a dos civiles, además de dejar herido a un tercero.

Según testigos y videos del momento, Rittenhouse tropezó y disparó a los manifestantes que intentaban quitarle el arma, luego que el joven hubiera apuntado y amenazado a varias personas con ésta.

“Estamos evaluando eso. Fue una situación interesante. Ustedes vieron el mismo vídeo que yo y él estaba tratando de escaparse de ellos (los manifestantes), supongo, así parece. Y se cayó y le atacaron muy violentamente (…) Supongo que estaba en un gran problema, probablemente le hubieran matado”, respondió Trump a la pregunta de por qué no condena a Rittenhouse.

Según algunos reportes, uno de los manifestantes le habría golpeado con una tabla de skate, mientras que otro habría portado un arma de mano, pero no la habría apuntado contra el tirador.

El joven de 17 años está en la prisión del condado de Lake y enfrenta dos cargos de homicidio y uno de intento de homicidio por sus acciones en Kenosha, donde se han sucedido protestas por los siete disparos que un policía blanco propinó este mes en la espalda al afroamericano Jacob Blake, quien quedó paralizado de cintura para abajo.

Trump viajará a Kenosha a subrayar su mensaje de que la policía está sitiada en ciudades lideradas por los demócratas, poniendo en peligro lo que él llama el “sueño americano”. La vocera del presidente, Kayleigh McEnany, dijo que no prevé encontrarse con la familia de Blake.

Seguridad en agenda electoral

Los abogados de Rittenhouse insisten en que el adolescente, quien era simpatizante de Trump y acudió a uno de sus mítines en enero, actuó en defensa propia, y algunos círculos de ultraderecha han empezado a justificar las acciones del joven.

Trump dio este lunes un largo discurso desde la Casa Blanca criticando a su rival en las elecciones de noviembre, el candidato presidencial demócrata Joe Biden, por supuestamente no condenar las acciones de las “turbas de izquierda” en las manifestaciones contra el racismo del país.

En respuesta, Biden lo acusó de fomentar la violencia, luego de que disturbios que han dejado varios muertos pusieran la seguridad en el debate, cuando faltan menos de dos meses para las elecciones.

Tras meses de encierro por la pandemia, Biden reapareció en Pensilvania, un tradicional bastión demócrata que hace cuatro años optó por Trump, para responder a los embates del mandatario, que lo llama “débil” y se presenta como el único garante de la “ley y el orden”.

El exvicepresidente de Barack Obama, que lidera en las encuestas para las elecciones del 3 de noviembre, contraatacó, describiendo a su rival republicano como “una presencia tóxica” desde hace cuatro años, que no sólo “no ha sido parte de la solución” sino que es “parte del problema”.

“Trump y Pence insisten en esto, y lo encuentro fascinante: ‘No estarás seguro en los Estados Unidos de Joe Biden’. ¿Y cuál es su prueba? La violencia que estamos viendo en los Estados Unidos de Donald Trump”, recalcó el candidato demócrata.