El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó el lunes que quiere reducir significativamente el número de soldados estadounidenses apostados en Alemania, al parecer usando la seguridad europea como palanca de presión para negociaciones comerciales con Berlín.

El mandatario aseguró a periodistas que unos 52.000 efectivos estadounidenses están apostados en Alemania, principal ancla de las fuerzas de Estados Unidos en el sistema de defensa colectiva de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

“Es un costo enorme para Estados Unidos”,
dijo Trump. “Así que reduciremos el número, lo llevaremos a 25.000”.

Según datos oficiales del Pentágono, el número de soldados desplegados permanentemente en Alemania ascendía a unos 34.600 en marzo. Pero esta cifra puede aumentar excepcionalmente a 52.000 durante las rotaciones o los ejercicios militares.

Las bases estadounidenses en Alemania sirven además de escala para las fuerzas desplegadas en Europa, África y Medio Oriente, lo que también puede aumentar temporalmente el número de efectivos.

Las primeras informaciones del plan del gobierno de Trump para reducir su presencia militar en Alemania habían causado preocupación en Berlín cuando fueron publicadas por el Wall Street Journal a principios de este mes.

La cifra anunciada por Trump el lunes en realidad coincide con las estimaciones del periódico, que señaló una reducción de 9.500 soldados para llevar el total a 25.000.

Si bien el número de fuerzas militares ha disminuido desde el fin de la Guerra Fría, Alemania acoge a más soldados estadounidenses que de cualquier otro país europeo, un legado de la ocupación aliada después de la Segunda Guerra Mundial.

“Deudor”

El resurgimiento de las ambiciones militares de Rusia bajo Vladimir Putin en los últimos 20 años ha hecho cobrar nueva relevancia a la presencia militar de Estados Unidos en territorio alemán. Pero Trump justificó su decisión por el hecho de que Alemania no contribuye lo suficiente al presupuesto de la OTAN.

“Alemania es deudor, lo han sido durante años y le deben miles de millones de dólares a la OTAN, y tienen que pagarlos. Así que estamos protegiendo a Alemania y son deudores. Eso no tiene sentido”, dijo.

Trump ha acusado en varias oportunidades a los miembros europeos del pacto atlántico de descansarse en Estados Unidos
e ignorar el compromiso de destinar al menos dos puntos de su PIB a defensa.

Además, el presidente estadounidense se quejó del trato comercial que recibe su país por parte de una de las principales potencias económicas de la Unión Europea, y mencionó que, en términos de intercambio comercial, Alemania le ha significado a Estados Unidos un costo de cientos de miles de millones de dólares.

“Estamos negociando con ellos sobre eso, pero en este momento no estoy satisfecho con el acuerdo que proponen”,
dijo.

“Nos perjudican en el comercio y nos perjudican en la OTAN”, añadió.

La relación de Trump con la canciller alemana, Angela Merkel, ha sido particularmente tensa desde que ésta rechazó la invitación del presidente a participar en persona en una cumbre del G7 en junio, evocando la pandemia de Covid-19.

El multimillonario republicano, que busca la reelección en el 3 de noviembre, quería mostrar su liderazgo mundial con una cumbre del G7 en Washington.

Después de la negativa de Merkel, pospuso la cumbre, anunciando sorpresivamente su intención de invitar a Rusia junto con varios otros líderes mundiales no pertenecientes al G7. Y calificó al grupo de las siete potencias occidentales como “obsoleto”.